Hasta hace un par de años, el sociólogo Tomás Rojas caminaba desde su casa en el barrio Bellavista hasta su trabajo, en el Ministerio de Justicia, en Morandé. Para acortar el tramo y conocer nuevos lugares del casco histórico, cruzaba de una calle a otra por el interior de las tradicionales galerías comerciales instaladas ahí, en las principales manzanas céntricas de la ciudad, desde el siglo XIX.
Fue el momento en que, asegura, se encantó con esos pasadizos. "Con el Pasaje Matte y las galerías Imperio y Edwards, entre varias", cuenta Rojas.
"El centro no puede ser entendido sin estas galerías. Construyeron el centro como se conoce hoy", explica este sociólogo de la Universidad Alberto Hurtado, quien en 2010 colaboró en una investigación sobre los pasajes de Providencia (hecha con la arquitecta Elke Schlack) y que el año pasado ganó un Fondart Regional del Consejo de la Cultura y las Artes de la Región Metropolitana. Se lo adjudicó junto a la magíster en sociología, Isabel Molina, para realizar el proyecto "Recorriendo las galerías comerciales de Santiago Centro; catastro para puesta en valor patrimonial".
En marzo comenzará la recolección de los antecedentes de cada uno de estos espacios comerciales ubicados entre la Alameda, Amunátegui, Santa Lucía y Santo Domingo.
Según sus estimaciones, de las 70 galerías de la ciudad, 27 de ellas están en este cuadrante. De cada una de ellas se recopilarán su historia y los planos, y se investigará acerca de sus propietarios, el tipo de comercio que albergan y el perfil de los clientes que por ahí circulan.
"Esos antecedentes no están reunidos en ninguna parte, sólo en tesis universitarias o en documentos que no son de fácil acceso", asegura Rojas.
Exposición y tour
El proyecto consta de un estudio etnográfico, el que incluirá entrevistas a transeúntes, locatarios antiguos y nuevos, y administradores. Todo, con el fin de determinar los comportamientos de quienes se mueven por ahí. Fuera de eso, se registrará fotográficamente cada pasaje comercial.
Rrecopilada la información completa en agosto, se elaborará un catálogo con el material de todas las galerías. Durante el mismo mes, se llevará a cabo una exposición fotográfica en la Posada del Corregidor y un recorrido patrimonial junto a Cultura Mapocho. Eso, además de imprimirse una guía turística sobre estos espacios.
Juan Ignacio Carmona, director del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes de la RM, valora la iniciativa. "Este proyecto es un aporte al conocimiento de la ciudad y a la conservación de sus espacios", comenta.
Historia de 160 años
El director del centro de patrimonio de la Universidad Católica, José Rosas, explica que la aparición de ese tipo de construcciones se remonta a 1850. En esa época se inauguró la Galería Bulnes (actual Pasaje Matte), la que se levantó en una manzana al sur de la Plaza de Armas, pertenecía al ex Presidente Manuel Bulnes.
El gran auge de estos espacios comerciales vendría a principios de los años 30, gracias al impulso del arquitecto austríaco Karl Brunner, autor del Barrio Cívico. "El promovió normativas que permitieron el desarrollo de pasajes abiertos capaces de conectar distintas calles", explica.
Gran parte de esas construcciones tenía ocho pisos y se dividían en un cuerpo inferior dedicados al comercio, un espacio intermedio para oficinas y viviendas y terrazas arriba. Si uno tomara de manera lineal los kilómetros de galerías, sumarían más de cinco", comenta Rosas.
Miguel Laborde, académico de la Universidad Diego Portales, explica que las galerías fueron una manera inteligente de densificar el centro, y que siguen teniendo éxito por los millones de usuarios que pasan cada día por allí.