Entre 13 a 98 días. Ese es el amplio rango que ha durado el encierro para los 13 participantes de Mundos Opuestos que ya no pasan sus días en el estudio de Pirque donde se graba el reality, sino que se encuentran de vuelta en sus actividades habituales. O, al menos, intentan hacerlo.

Tras pasar varios meses en el país haciendo eventos en discoteques y empresas, en estos días Marcelo Marocchino está terminando su carrera de Economía y comercio en Italia, pero planea volver, posiblemente el próximo fin de semana, para ser parte de eventos en discotheques, desarrollar un proyecto que no es de TV, además de estudiar teatro y armar una pizzería con un amigo chef.

Ivana Simunovic es otra persona que volvió a las aulas: "Estoy cansada como las 'pernas', estudiando a 'full' para las pruebas de Ingeniería comercial en la Andrés Bello", comenta entre risas y cuenta que se juntó bastantre con el italiano tras su paso por el reality, de hecho, Marocchino se hizo muy amigo con el pololo de Ivana.

Simunovic agrega "me gustaría trabajar para ganar un poco de plata propia, ya que me quedó gustando después del reality. Ha sido la única vez que he trabajado en mi vida y me sirvió mucho porque le tomé el peso a lo que vale el esfuerzo. Sé que, dentro de los trabajos, entrar a un reality es bastante entretenido, pero también siento que vendes tu tiempo, tu familia, todo. Por lo que, de todas maneras, hay sacrificio".

El más reciente eliminado, Nelson Tapia, también tiene como prioridad sus estudios: su carrera de entenador en INAF, el Instituto Nacional del Fútbol, Deporte y Actividad Física. "Lo mío está netamente fuera de la TV, terminé mi participación, aparecí en los programas a los que tenía que ir por contrato y de ahí me desligo del tema", dice y comenta que agregará a las charlas motivacionales y de liderazgo que da en universidades y empresas su paso por Mundos Opuestos. También cuenta que tuvo muy buenas relaciones con Agustín Pastorino y el 'Chispa', con los que quedó en juntarse cuanto salgan del encierro.

Mario "Chapulín" Moreno, también reniega de la televisión y da el tema del reality por cerrado. "Soy antifarándula y ahora hago lo que he hecho toda mi vida, como partir al estadio a ver a Colo Colo y viajar a ver a la Selección. Ahora me levanto y voy a trabajar (maneja un taxi). Ya pasé esa etapa, yo soy de estadio, 'chao' con el reality".

A FULL CON EVENTOS Y TRABAJO

A diferencia de Tapia y Moreno, participantes como Camila Nash, Wilma González y Nicole "Luli" Moreno han seguido ligadas al mundo de la TV y el espectáculo.

Al igual que Nash, González apareció en programas como Teatro en Chilevisión y Síganme los buenos, y su agenda está llena de eventos: hoy estará en Coquimbo, mañana en Linares y San Javier mientras que la próxima semana viajará a Concepción y Ovalle. Aunque para la ex chica Playboy su salida fue "igual un poco fuerte, extraña" y demoró en adaptarse a la civilización, está particularmente feliz por volver a ver a su hijo Noah. Nash cuenta que ha hecho algunos eventos y que entre el 18 y 20 y el 25 y 27 de mayo participará en la carpa de humor del Bebeto Chupeta, haciendo una recreación de Mundos opuestos: "No haría otra cosa, nada que ver que yo apareciera con plumas", comenta y agrega que últimamente ha estado en contacto con González -a quien llamó para ofrecerle su ayuda tras la salida del estudio de Pirque- e Ivana.

Por su parte, Luli también ha hecho eventos de empresas y discoteques aparte de la revista Los gordos las prefieren rubias y morenas, recorriendo varias regiones. También le ofrecieron grabar un comercial de una bebida de fantasía y está analizando si lo hace o no. De todos modos, no sólo ha trabajado: fue de vacaciones a Brasil junto a la primera eliminada: Tamara Sepúlveda.

"Cuando salió, se comunicó inmediatamente conmigo, nos llevamos muy bien y nos parecemos", cuenta Sepúlveda, la chica de Curicó, que también ha hecho eventos y que en las últimas semanas ha tenido que hacerse cargo de su padre, quien ha tenido problemas de salud y se encuentra internado en la UCI. "Soy hija única, así que estoy aperrando con todo", dice. Es por eso que no ha dejado de lado el trabajo, y cree que tendrá aparte de desfiles en discotheques, tendrá que producir actividades de la empresa de eventos de su padre, quien organiza actividades como corridas familiares y ferias estudiantiles. Mientras prepara algunos actos en beneficio para pagar los gastos médicos de la hospitalización, invita a unirse a una cadena de oración cada día desde las 20 horas.

En el caso de Daniela Muñoz, quien ha seguido en contacto con Fernando Poblete, Romina Sepúlveda y Mario Moreno, la futbolista dice que ha seguido inmersa en el mundo del deporte y sigue trabajando como promotora, pero comenta que ha conseguido mejores oportunidades tras su paso por el reality. "Estoy súper agradecida, además, todo lo que se vió se relaciona a cómo soy en la vida real", dice y cuenta: "Me ofrecieron para un evento desfile de ropa interior, pero lo rechacé. Me encantaría entrar al programa Calle 7, es el formato que más que acomodaría porque me gustaría mostrar lo deportista que soy", asegura.

A LA DERIVA
Antes de entrar al programa, Fernando Poblete trabajaba como asistente educacional en un colegio de Conchalí, trabajo al que esperaba volver cuando saliera del encierro, porque la dueña del lugar dejó "las puertas abiertas" para que retomara su labor. De hecho, él contaba con esto y cuidó de meterse en problemas durante el encierro para ser un buen ejemplo para los niños.

El problema es que el colegio cambió de sostenedor y sus planes se truncaron: quedando sin trabajo hasta hace dos semanas. Si bien Poblete comenta que quedó "a la deriva", no despotrica contra el programa: "Tengo sentimientos encontrados, porque es una experiencia que no hay forma de explicarla, tienes que vivirla, igual saco hartas ventajas de eso: te está viendo tu familia y conoces a gente increíble, la misma Wilma es súper humilde, nunca fue quebrada, al igual que Thiago", comenta y cuenta que ha mantenido el contacto con Daniela Muñoz y Romina Reyes.

Esta estilista justamente ha hecho noticia en los últimos días al decir que no le han pagado todo lo que se le debe por su participación en el reality. "Me han ido depositando de a partes, por eso tengo que ir a ver el cajero, quizás ya depositaron, pero no ha habido llamadas ni correos", dice y comenta que también se siente a la deriva. De todos modos, aclara que no tiene problemas con Canal 13, sino que con la producción del reality. "Salí con una lesión, pero no me han ofrecido ayuda con eso o apoyo psicológico tras el encierro, por ejemplo", dice y agrega: "Desde que entré, me cambió la perspectiva de lo que es un show de TV, fue fuerte".

Cuenta que ha vuelto a trabajar como estilista, pero que le gustaría ser anfitriona de eventos en empresas o quizás en casinos, por lo que está trabajando con la representante de Yamna Lobos, y que por el momento ha ido gratis a algunos programas de TV: "Tampoco me preocupa aparecer o no porque tengo mi oficio, igual aprovecho las oportunidades: fui a un casting de Quiero un cambio para poder operarme gratis, pero no me asusta no quedar".