Mil, diez mil o cien mil veces más contaminación que las normas recomendadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS) producen algunas de las estufas a combustión más usadas en Chile.
Así lo concluye un estudio del Centro Nacional de Medio Ambiente de la Universidad de Chile (Cenma), que durante más de un año comparó las emisiones de seis estufas ha combustión, concluyendo que las estufas a leña (doble cámara) y a parafina (tanto de mecha simple como de última tecnología) son las que emiten más gases contaminantes y generan el mayor impacto negativo en la calidad del airea intradomiciliario.
El estudio "Evaluación de impacto atmosférico de Sistemas de calefacción domiciliaria", calificó como las menos contaminantes a las estufas a gas licuado, tanto de gas radiante como la de convección forzada. "En la tecnología a gas, es tan poca la emisión de partículas que tiene, que no pudimos detectar varias de ellas. Por ende, podemos decir que son las menos contaminantes y las más limpias", explicó José Salim, jefe del laboratorio de modelación e inventarios de emisiones del Cenma.
Para elaborar este ranking, el organismo creó un índice denominado Potencial de Impacto Domiciliario (PID), que considera los resultados de las emisiones y los niveles de calidad del aire recomendados por la OMS para cada tipo de contaminante.
EMISION DE HIDROCARBUROS
A esto sumó por primera vez en este tipo de estudios la emisión de hidrocarburos aromáticos policíclicos (Hap's), que tiene un efecto dañino en la salud, sobre todo para quienes se exponen por largo tiempo al gas.
Según este parámetro, el calefactor a leña es cien mil veces más contaminante (ver infografía). Le siguen las estufas a parafina de mecha tradicional y las modernas versiones de estufa a parafina, de mecha con nueva tecnología.
"Los Hap's pueden provocar varios tipos de trastornos a largo plazo, tanto a nivel pulmonar como otros tipos de enfermedades, incluso genéticas y reproductivas", explicó el doctor Andrei Tchernitchin, experto en toxicología ambiental de la U. de Chile. Incluso, según el especialista puede originar cáncer pulmonar.
En cuanto a las estufas a parafina, la presencia de dióxido de azufre (SO2) las convierte en una de las que producen emisiones más conta- minantes. Además, produce irritación de las vías respiratorias.
"La más contaminante dentro de esa línea es la de mecha con nueva tecnología, que emite óxido de nitrógeno y parte importante de partículas. Mientras que la parafina a láser tuvo un poco de mejor desempeño", explicó Salim.
Para el experto, los resultados arrojan potenciales riesgos a la salud, por lo que "es importante que la gente tenga la información a disposición para elegir". Salim, agregó que espera que a raíz del estudio se orienten acciones para mejorar estos aparatos, por ejemplo, disminuir el azufre en la parafina.
Para el doctor Tchernitchin, "indudablemente, la más peligrosa es la calefacción a leña, incluso para lo que emite dentro de las habitaciones, que es lo nuevo que estamos viendo. Pero además, contribuye al material particulado que contamina la ciudad", dice el especialista, coincidiendo en que las menos nocivas son las estufas a gas. Advirtiendo que la parafina podría producir una irritación del aparato respiratoria (bronquitis).
EL INDICE EXTERNO DE LA CALEFACCION
Considerando que los sistemas de calefacción domiciliaria también producen un impacto externo a la vivienda, al incorporar sus emisiones al medioambiente, el Cenma creó y desarrollo un segundo índice, denominado Potencial de Impacto Externo Relativo (Pier), el cual se calculó utilizando las emisiones de cada tecnología en función de la energía consumida, y el total de emisiones de todas las tecnologías evaluadas. De acuerdo con los resultados, la estufa a leña doble cámara también lidera el indicador Pier, siendo la más contaminante, la sigue la estufa a parafina de mecha simple, luego la estufa mecha con tecnología y la estufa a parafina láser. Las estufas a gas licuado mostraron tener los menores aportes a la contaminación extradomiciliaria, según la investigación del Cenma. La emisión de PM 2,5 es uno de los contaminantes más altos dentro de las emisiones de los calefactores a leña, al igual que de hidrocarburos.