Apenas nueve horas después de regresar de Lyon, donde logró la clasificación para la final de la Eurocopa, por segunda vez en su historia, la selección portuguesa regresó a los entrenamientos en Marcoussis, con una práctica abierta al público.
Portugal abrió las puertas para festejar la clasificación y corresponder a una afición que esperó hasta las 3 de la madrugada, en los alrededores del centro nacional del rugby francés, la llegada del bus con la delegación lusa, que horas antes había derrotado a Gales, por 2-0, en Lyon.
Con las galerías repletas, los jugadores titulares ante Gales encabezados por Cristiano Ronaldo salieron a saludar a los aficionados y luego hicieron trabajo de recuperación en el gimnasio, en el que también estuvo Pepe, ausente por lesión en el encuentro de cuartos.
El meta Rui Patricio y Bruno Alves, que contra Gales jugó su primer partido en el torneo, sí volvieron al terreno de juego junto a los suplentes. El arquero hizo carrera continua y ejercicios de recuperación y el central se integró al tenis-fútbol.