Llegó a Copenhague para participar en la Cumbre del Cambio Climático, precedido por una gran victoria en las elecciones del 6 de diciembre. Reelegido por cinco años, Evo Morales tiene ahora en sus manos una parte sustantiva de los poderes del Estado. El asegura que emprenderá un "gobierno de diálogo", en el que se embarquen la oposición y las fuerzas sociales. Sin embargo, sus palabras más duras son contra el Presidente de Estados Unidos, Barack Obama, a quien acusa de seguir las políticas de su predecesor.

Los países ricos anunciaron en Copenhague miles de millones de dólares para solucionar el problema del clima. ¿Qué opina de eso?
Es una ofensa para los países con industrialización irracional. Los conocidos como ricos ya no lo son; les falta mucha riqueza ética-moral. La deuda ecológica no tiene precio. Hay que cambiar el capitalismo, los modelos económicos vigentes, que sólo buscan el consumismo, el lujo, y no hay políticas sociales que permitan acabar con la pobreza. Por eso es condenable esa propuesta. No repara ningún daño.

Obtuvo una victoria avasalladora en las elecciones. ¿Por qué?
Cumplimos nuestros compromisos de la campaña de 2005: la Asamblea Constituyente. Lo segundo era nacionalizar los hidrocarburos. Cumplimos. Con las exportaciones del petróleo o de los hidrocarburos de 2005, Bolivia recibió 200 millones de euros, ahora recibimos 1.400 millones. De 1940 a 2005, siempre sufrimos déficit fiscal. Desde 2006, gozamos de superávit fiscal.

Los poderes Ejecutivo y Legislativo están en sus manos. ¿Qué tipo de gobierno hará?
Uno de diálogo, con sindicalistas o con cualquier sector social o con la oposición. Siempre me han acusado de autoritario: a un presidente que ganó con un 54% de los votos en 2005. Para los presidentes que ganaron con el 20%, nunca hubo referéndum revocatorio. Para mí sí. Al final, me ratificaron con un 67%. Yo gobierno subordinado al pueblo boliviano. Esa es la democracia participativa, decisiva.

En ese marco, ¿cuál es el papel que usted da a la oposición?
Es mejor hablar con los pueblos, con las fuerzas sociales. Entender, conocer y atender las demandas que tienen. Hablaremos con los movimientos sociales y con la oposición y si son propuestas serias, responsables para Bolivia, bienvenidas sean; yo también he estado en la oposición.

¿Qué le parece el tirón de orejas de Hillary Clinton a Bolivia por tener relaciones con Irán?
Se acabaron las actitudes de carácter colonial. Ahora, con más fuerza, vamos a seguir teniendo relaciones con los países revolucionarios. Lamento que el Presidente Obama se esté desgastando en tan corto tiempo. Podría darle clases de cómo mejorar su imagen, trabajando por la igualdad. Es lamentable que un hermano negro, con sus padres discriminados, igual que el movimiento indígena, haga esta política. A ver si los indios y los negros nos unimos para resolver los problemas estructurales. El negro es el mejor alumno del blanco: Bush.

¿Hay que esperar 200 años más para una integración regional?
La ventaja es que los pueblos no estamos divididos. Las fuerzas sociales tienen una enorme coincidencia en nuestras reivindicaciones históricas. Pero sí, el imperio nos divide. ¿Qué es Colombia, Alan García? Son los niños mimados de EE.UU. Respecto de las bases militares de Estados Unidos en América Latina, planteo un referéndum sudamericano, para que los pueblos decidan si aceptan bases militares en su territorio. Si en esa votación gana el no, tendría que ser vinculante para todos los pueblos de Sudamérica.