El presidente boliviano Evo Morales inauguró  este viernes en su localidad de origen, Orinoca (oeste), las obras de un museo  que estará dedicado a su gestión y a las luchas indígenas, el más grande del  país, que costará unos 7,2 millones de dólares.

El mandatario, un indígena aymara de 53 años que está en el poder hace  siete, hizo el anuncio en la localidad situada 350 km al sur de La Paz, donde  autoridades gubernamentales suscribieron un acuerdo con una firma privada para  la construcción del museo, según imágenes difundidas por el canal estatal de  televisión.

El museo será "histórico, inédito, algunos decían que va a ser el más  grande de toda Sudamérica", dijo Morales. 

El presidente informó que el edificio, de 6.000 metros cuadrados, tendrá un  costo de "50 millones de bolivianos", unos 7,2 millones de dólares.

La idea de construir el museo surgió de la infinidad de regalos  provenientes de Bolivia, Europa y Asia que recibió el mandatario durante sus  años de gestión, según comentó durante la firma del acuerdo.

"Tiene que haber un museo de Evo Morales, donde se queden todos los regalos  (...), hay regalos de países de Europa y de Asia, algunos regalos cuestan  5.000, 10.000 o 15.000 dólares, ahí están", afirmó. 

Morales explicó que, más tarde, sus colaboradores le sugirieron construir  "un museo de la revolución democrática y cultural", la denominación que utiliza  el oficialismo para caracterizar al gobierno, de tinte nacionalista,  izquierdista e indigenista.

En el museo también se podrá ver la historia del país "desde antes de la  invasión europea, la lucha de los movimientos indígenas durante la colonia y la  república", agregó Morales.

Antes de llegar al poder en 2006, Morales se desempeñó en múltiples  actividades. De niño fue criador de llamas, de joven trompetista de música  criolla, y más tarde vendedor de helados y cultivador de coca, hasta acceder al  gobierno con el apoyo del 54% de los votantes.

En 2009, el presidente fue reelecto para un segundo mandato hasta 2004 con  el 64% de apoyo popular, y en Bolivia ya se habla de su eventual candidatura  para un tercer mandato.