Una huelga de hambre iniciaron la noche de ayer y en las afueras de la catedral de Los Angeles, diez ex conscriptos sobrevivientes de la tragedia de Antuco, ocurrida en mayo de 2005 y en donde murieron 45 miembros del Ejército.

Los ex soldados sostienen que el Gobierno no ha cumplido con el programa de ayuda prometida para ellos, plan que contempla la entrega de becas de estudio, beneficios habitacionales y acceso a atención de salud.

Rodrigo Morales, vocero de los ex conscriptos, pidió con urgencia una reunión con la Presidenta de la República, Michelle Bachelet, para explicarle la situación y llegar a un acuerdo, criticando que las autoridades de la zona los han dejado de lado.

Los jóvenes esperan que a medida que pasen las horas se sumen más adherentes a su movilización, la que hasta el momento contempla sólo el no ingerir líquido.

Por su parte, desde la gobernación provincial del Bío Bío se indicó que han tratado de acercarse a los ex conscriptos y que incluso desde la Subsecretaría del Interior se trató de solucionar el tema antes del inicio de la huelga, pero sin tener resultados, por lo que esperan que los soldados depongan su movilización y puedan sentarse a conversar.