El ex detenido de Guantánamo Binyam  Mohamed, liberado y nuevamente en Gran Bretaña desde febrero,  inició una batalla legal para impedir que Estados Unidos  destruya una fotografía que a su entender prueba las torturas  que sufrió durante su período de detención en ese campo de  detención norteamericano.

Según refirió hoy The Guardian, la fotografía fue tomada en  2006 después de que Mohamed, un ciudadano etíope residente en el  Reino Unido, fue golpeado violentamente por los guardias.

La fotografía había sido colocada en la puerta de su celda  porque los golpes fueron tales que hicieron que a los guardias  les costara identificarlo.

Según las leyes estadounidenses, las pruebas relativas a los  casos que fueron cerrados deben ser destruidas. El único modo  para salvar la fotografía es transformarla en una nueva prueba  judicial, que es lo que Mohamed quiere hacer.

Para ello, acudió también a la Corte del distrito federal de  Washington afirmando que la imagen representa una prueba  fundamental en su proceso legal contra las autoridades estadounidenses.