A casi una semana de haber presentado su renuncia a la Subsecretaría del Interior por supuestas irregularidades en la licitación de equipos de detección de drogas, el ex fiscal Alejandro Peña (45) apunta a la responsabilidad de sus subalternos en la División de Estudios, dos de los cuales debieron seguir sus pasos y dimitir. "Hay confianzas congeladas", dice a la edición impresa de La Tercera.
Pero Peña ha cambiado el tono respecto del rol del subsecretario del Interior Rodrigo Ubilla en los hechos: "Ambos fuimos engañados".
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