Una querella por los delitos de amenazas, porte ilegal de armas y asociación ilícita presentó ayer la ex funcionaria de la División de Seguridad Pública (DSP) del Ministerio del Interior Paula Leyton, quien a comienzos de septiembre denunció a la Fiscalía Centro Norte una serie de actos de amedrentamiento que, según ella, sufrió durante los últimos meses de permanencia en el organismo que depende del subsecretario del Interior, Patricio Rosende.

En uno de los episodios descritos, Leyton señala que la jefatura de la DSP ordenó al departamento de informática de la entidad intervenir su correo electrónico para que, antes de que los mensajes llegaran a su computador, fueran revisados por sus superiores, con quienes había comenzado a tener fuertes desavenencias. Los conflictos más graves los tuvo con la entonces directora del organismo, Gloria Requena, y su pareja, el jefe de la Unidad de Control y Sanción de la DSP, Francisco Troncoso, ambos socialistas al igual que ella. Paula Leyton sostiene que recibió una serie de mensajes de amenazas en su PC.

En otro capítulo de la querella, Leyton sostiene que el 22 de enero fue citada a una reunión a la oficina dirigida por Troncoso, ubicada en Paseo Bulnes 147. Según el escrito, conocido por La Tercera, Francisco Troncoso la esperaba con un arma de fuego sobre su escritorio, en lo que ella interpretó como una intimidación.

La ex funcionaria asegura haber recibido llamados telefónicos periódicos de Troncoso, recordándole que le quedaba poco tiempo en su trabajo. Asimismo, atribuye las amenazas a una serie de divergencias internas en la DSP, que llevaron a su salida del organismo en agosto pasado. Incluso, sostiene que a principios de septiembre desconocidos perforaron el estanque de bencina de su automóvil.

Hace una semana, la fiscalía incautó un computador y una blackberry desde dependencias de la DSP para someterlos a pericias. Además, se ordenó protección policial a Leyton. Trascendió que la fiscalía también indaga antecedentes sobre presuntas anomalías financieras al interior del organismo.

Cercanos a Troncoso, quien ayer declinó referirse al caso, rechazaron tajantemente las denuncias de Leyton y dijeron que la ex funcionaria se expone a una querella por injurias. Respecto de la denuncia sobre el presunto uso de un arma, señalaron que "es algo francamente ridículo, puesto que en la oficina de Seguridad Pública y en la subsecretaría hay cámaras por todos lados. Por lo tanto, la persona que pudo estar armada habría sido detectada".