En las mismas dependencias donde se grabó -hace 24 años- la franja del No, el ex ministro Andrés Velasco relanzará hoy su candidatura a La Moneda.
Rodeado de un grupo de sus partidarios, entre ellos su jefe de campaña, Cristóbal Aninat, el ex jefe del equipo económico de Michelle Bachelet llegará hasta el teatro Huemul a las 10.30 horas.
El lugar escogido para la intervención de Velasco no es casual: junto con reafirmar su compromiso con la carrera a La Moneda, una de las apuestas de la nueva etapa del ex ministro apunta a recomponer lazos con la Concertación.
En esa línea, Velasco no sólo manifestará su compromiso de participar en las primarias de la oposición en 2013, sino que también descartará la eventualidad de llevar su opción hasta la primera vuelta presidencial.
Después de las municipales, de hecho, el propio ex secretario de Estado y miembros de su equipo han respondido positivamente a los mensajes que personeros del PS le han enviado para garantizar su participación en las primarias.
VOY. es el lema del reimpulso de la primera aventura electoral del ex ministro, el que va acompañado de numerosas manos haciendo el símbolo de la victoria.
La gráfica - a cargo de Patricio del Sante- pretende cristalizar la intención de Velasco de mantener su candidatura hasta la definición de junio, cuando, junto a otras cartas, mida sus posibilidades frente a Bachelet.
Para mañana, en tanto, está programada su primera actividad en terreno posrelanzamiento, donde se manifestará en contra de todo tipo de discriminación.
Relación con Bachelet
La nueva etapa de campaña de Velasco ha sido diseñada en estricta reserva en los últimos dos meses.
Uno de los nudos más complejos de resolver, señalan en el comando del ex ministro, es la relación con Bachelet.
Aunque fue uno de sus colaboradores más cercanos mientras estuvo en el gobierno, Velasco y la ex mandataria no mantienen en la actualidad vínculos periódicos.
Fuentes del PS afirman que la relación se trizó luego de que el ex secretario de Estado manifestara su intención de participar en las primarias opositoras "con o sin Bachelet".
El mensaje supuso un cambio radical en la estrategia presidencial de Velasco, quien sólo meses antes se había lanzado a la carrera con el propósito de convertirse en el "second best" de la ex jefa de Estado. Es decir, apostar a que Bachelet no se entusiasmara con la reelección y le terminara entregando su respaldo.
En el comando del ex ministro afirman que, en un escenario de competencia, marcar diferencias con la ex mandataria será ineludible.
Según adelantaron las mismas fuentes, una de las estrategias apuntará a criticar el silencio que ha mantenido la ex mandataria desde que asumió la dirección de ONU-Mujeres. En esa línea, el ex ministro señalará que "una campaña del silencio sólo perjudica a la ciudadanía".
La apuesta, en todo caso, es forzar el regreso de Bachelet, que en las filas opositoras, incluso, algunos fijan para marzo de 2013.
El segundo desafío de Velasco en esta nueva etapa, señalan en su comando, es recomponer relaciones con la Concertación.
En esta línea, el ex ministro reforzará el mensaje de que sus críticas de los últimos meses -cuando acusó "malas prácticas" en la elite concertacionista y en particular del senador Guido Girardi (PPD)- apuntan a un sector del conglomerado, pero no a su totalidad.
En los focus group realizados hasta la fecha, según señalan en el comando, Velasco aparece bien evaluado entre los militantes de base de la Concertación, a quienes comenzará a dirigir su discurso.