El ex presidente boliviano, Carlos Mesa, dijo hoy que el gobierno de su país "ha decidido llevar las cosas a un punto de todo o nada", en el caso de los tres soldados detenidos en el norte de Chile por haber traspasado la frontera en forma ilegal portando armamento de guerra.
Los conscriptos quedaron con medidas cautelares de arraigo nacional y firma semanal en el caso de dos de ellos y con arresto domiciliario nocturno y arraigo nacional, en el caso del soldado que portaba armamento de guerra, luego de rechazar la salida alternativa de juicio abreviado que les ofreció la Fiscalía de Tarapacá.
"Está claro que el gobierno de Bolivia ha decidido llevar las cosas a un punto de todo o nada en el tema de los conscriptos, o los devuelven sin ningún tipo de consideración o no vamos a aceptar esa figura, y los conscriptos han avenido en esa estrategia a plantear exactamente lo mismo, lo que complica la relación porque Chile esperaba resolver el problema hoy día", dijo Carlos Mesa a CNN Chile.
El ex mandatario agregó que el haber judicializado la situación de los soldados es "una acción diplomática tan fuera del contexto de la tradición de Chile, que se ha caracterizado por mucho cuidado en sus relaciones diplomáticas por duras que estas fueren, y en ese contexto creo que el gobierno del Presidente Piñera ha dado un traspié que se ha puesto en evidencia no solamente en su relación bilateral sino ante la comundiad internacional".
Carlos Mesa puntualizó que el hecho de que se mantenga el proceso de los soldados en Chile "coloca las cosas en posición de tensión porque mientras los conscriptos estén en territorio chileno, por mucho que estén en libertad, el gobnierno de Bolivia va a seguir poniendo ante la comunidad internacional la evidencia de que no hay una respuesta adecuada", indicó.