El ex primer ministro sirio Riad Hijab, que desertó recientemente y se refugió en Jordania, señaló en Jordania que el régimen del Presidente Bashar Assad se está "derrumbando moral, económica y militarmente" y que actualmente no controla más del 30% del territorio.

En su primera intervención pública tras abandonar Siria, Hijab pidió la unión de los opositores en el exilio y que los oficiales del Ejército de Assad se sumen a la revolución, agregando que desertó de forma voluntaria cuando ejercía como jefe de gobierno y negó que hubiera sido destituido, como afirmó Damasco.

Según Hijab, el régimen sirio actualmente se sostiene gracias a "la opresión", mientras que la brecha entre el gobierno y los ciudadanos es cada vez mayor. "El gobierno no era capaz de satisfacer las esperanzas del pueblo y parecía que yo estaba en contra de la gente, pero sólo Dios sabe lo que sufría cuando escuchaba las informaciones de bombardeos en las distintas ciudades", aseguró.

"Las brigadas del Ejército Libre Sirio desempeñaron un papel importante en mi salida de Siria", destacó el ex primer ministro, en alusión a los rebeldes que le ayudaron a escapar pese al cerco militar que las autoridades impusieron en el sur del país tras conocer su deserción.

Hijab se declaró "inocente respecto al régimen corrupto", del que desertó para "servir a la patria y estar satisfecho". Asimismo, prometió ser "un soldado fiel a su país entre las filas de los revolucionarios", sin mostrar ninguna aspiración a un puesto en el futuro.