Correos electrónicos, la contratación de una conocida de Luis Eugenio Díaz, reuniones sobre temas de la acreditación de la Universidad SEK y la filtración del informe financiero fueron los antecedentes que expuso ayer la fiscalía para formalizar al ex rector de esa casa de estudio, José Schroeder, por el posible delito de soborno.

Según los fiscales Pablo Norambuena y Carlos Gajardo, el ex presidente subrogante de la Comisión Nacional de Acreditación (CNA), Luis Eugenio Díaz, le habría pedido por mail a Schroeder que contratara a una conocida, a cambio de su asesoría a través de ella en el proceso de acreditación de la universidad. Los fiscales indicaron que esto se concretó y que, posteriormente, hay correos y testimonios de que Díaz asesoró en la elaboración del informe de autoevaluación y que más tarde, le filtró a Schroeder un informe financiero de la Universidad SEK, mientras era comisionado de la CNA.

La conocida de Díaz recibió un pago de $ 2,6 millones por conceptos de asesorías y el fiscal Gajardo indicó que el pago de la primera boleta fue avisado por mail a Díaz y posteriormente, fue a buscarlo a la casa de estudios.

El abogado defensor de Schroeder, Jorge Guerrero, dijo que estos correos electrónicos enviados por Díaz eran una "imprudencia brutal". Incluso, su abogado reveló un hecho hasta ahora desconocido: Díaz le pidió al ex rector que contratara la empresa de su hijo y que se desechó efectuar la contratación. Finalmente, se decretó la firma mensual, arraigo nacional y la prohibición de contactarse con los otros imputados.

A la salida, Schroeder señaló que "estoy contento porque mi abogado pudo exponer los antecedentes. Yo no soy un empresario de la educación. Soy un rector y un profesor de historia que ha ejercido durante 30 años la docencia. No pertenezco al círculo de dueños de la universidad. No tengo ningún interés particular más que servir a la educación".

Agregó que "se me ha hecho un daño enorme, he perdido mi trabajo y he tenido que sobrevivir a todo esto. Estoy dolido y muy afectado y soy una persona que la han tratado de destruir sin haber cometido delito. Soy inocente".

Sobre la eventual responsabilidad de Schroeder, el fiscal Gajardo señaló que "no ha existido un lavado de dinero y su situación personal es distinta, dado que no es propietario o controlador de la institución que participó de la acreditación". Gajardo agregó que tras la declaración de Jorge Segovia, quien es uno de los controladores de la Universidad SEK, la fiscalía dijo que no hay antecedentes que lo vinculen con este hecho.

Desde la universidad enviaron un comunicado en que señalan que no han tenido ninguna relación con algún miembro de la CNA y que "no ha efectuado pago alguno o entrega de beneficio económico a ningún integrante de dicha entidad, en forma directa o a través de un tercero. El proceso de investigación no ha demostrado la existencia de fundamentos que cuestionen a la institución".

Tras la formalización, el Ministerio de Educación anunció que iniciará una investigación administrativa y solicitará los antecedentes a la fiscalía y la CNA para determinar si se vulneró la normativa. "Esta investigación se inicia frente a los antecedentes que ha reunido la justicia, en que a un ex rector de esta institución se le acusa de un eventual cohecho", señaló el subsecretario Fernando Rojas.