Exceso de jugadores extranjeros en cancha: un error que en el fútbol chileno dejó de ser aislado

Curiosamente, el estadio Municipal de Yumbel fue el testigo del primer y del último error de un técnico que tuvo en cancha a más jugadores extranjeros que los permitidos por el reglamento. Quizás, una prueba de que este tipo de yerros ya dejó de ser aislado en el fútbol de nuestro país.

En efecto, y con el episodio protagonizado por el entrenador argentino de Universidad de Concepción, Pablo Sánchez, desde 2009 ya han sido seis las ocasiones en que se ha excedido el número de cinco futbolistas foráneos como tope.

La primera vez que se produjo este episodio que violó el reglamento fue en el citado reducto de la Región del Biobío, cuando el DT de Curicó Unido, Luis Marcoleta, dispuso en cancha al paraguayo Braulio Armoa, al uruguayo Alberto Ortega, y a los argentinos Sebastián Morquio, Mateo Martinelli y Marcos Flores, para después hacer ingresar al transandino Sergio Valenti. Ello, en el duelo ante la "U" penquista en el Clausura 2009.

Al mes siguiente del incidente, el DT de Rangers, Óscar del Solar, repitió el error al iniciar ante Cobreloa en Calama con los argentinos Ezequiel Brítez, Pablo Vranjican, Mariano Celasco y Eduardo Dos Santos, más el paraguayo Roberto Bonet. Y a los 46', hizo ingresar al transandino Lucas Ojeda. Así, los maulinos fueron castigados con tres puntos que terminaron condenándolos al descenso.

Por la Copa Chile de 2011, Arturo Salah inició el equipo titular ante Universidad de Concepción con los argentinos Cristian Muñoz, José Luis Zelaye, Paolo Frangipane y el uruguayo Williams Martínez. Pero después, hizo entrar a los transandinos Javier Rossi y Jesús Vera.

El siguiente episodio tuvo lugar el 5 de agosto en el Torneo de Clausura 2012 con el técnico de Unión Española, José Luis Sierra, quien puso a los argentinos Enzo Ruiz, Nicolás Berardo, Emiliano Vecchio, Mauro Díaz, Sebastián Jaime y al uruguayo Diego Scotti. Esto, frente a Universidad Católica.

Y en un partido válido por el Clausura 2013-2014, en agosto de 2013, el DT de Santiago Wanderers, Ivo Basay, alineó ante O'Higgins en La Calera al uruguayo Mauricio Prieto, además de los argentinos Ezequiel Luna, Leandro Torres y Marcos Sebastián Pol. Sin embargo, en la segunda parte hizo ingresar a los transandinos Nicolás López Macri y a Gastón Cellerino.

Ahora, Pablo Sánchez fue el último caso (aunque el primero considerando adiestradores extranjeros), aunque recibió el respaldo del club penquista. "Ante los hechos, nuestro Club los reconoce y hace llegar a todos los destinatarios de este comunicado las disculpas de nuestro Cuerpo Técnico, cuyos integrantes se encuentran muy tristes y afectados por el error cometido", sostiene una nota enviada por la institución del Campanil.

"Lo ocurrido se trató de un lamentable error humano, con culpables que lo han reconocido hidalgamente ante nuestras autoridades", añadió el comunicado.

LOS DESCARGOS DE "VITAMINA"

Tras cometer el error, Pablo Sánchez aseguró que "el día de mañana va a ser una anécdota, pero hoy todavía nos duele el error y como cabeza del Cuerpo Técnico me hago responsable. Son este tipo de circunstancias que uno cree que nunca van a pasar".

"Surge por el ansia de querer ganar y sellar la clasificación. Debemos asumirlo como tal, pagar las consecuencias que se merecen y nos acatamos a lo que dictamine la ANFP y su reglamento", argumentó el Rosarino.

"Es inevitable no ver el contexto general en el cual estamos envueltos, el tipo de competencia, las posibilidades que poseemos de cara a lo que viene. En ese sentido, hubiese sido muchísimo más grave en momentos complicados, pero no nos desligamos de la equivocación", cerró..