El proyecto de ampliación del Mall Marina, en Viña del Mar -anteriormente conocido como Marina Arauco II-podrá al fin abrir sus puertas durante el primer semestre del 2018, luego de dos años de retraso pordisputas con la municipalidad de dicha comuna.
Así lo confirma el gerente general de grupo Marina, Sergio Nova, quien en conversaciones con La Tercera, revela que el proyecto -del que son socios Parque Arauco y Ripley y que contempló una inversión superior a los US$ 100 millones- se encuentra en etapa final, con el 98% de la obra gruesa terminada y un avance del 60% en las terminaciones.
"Hay una creciente necesidad de traer nuevas propuestas comerciales para satisfacer las demandas de los consumidores de la V Región y evitar así que se desplacen a la capital", dice Nova, quien además señala que dentro de sus expectativas también está atraer el turismo de shopping de todos los visitantes que llegan a la región.
"Con los nuevos y mejores estacionamientos y las mitigaciones que estamos realizando, esperamos facilitar el acceso y circulaciones en la zona", puntualiza.
El proyecto, que estará ubicado en 14 Norte con 2 Oriente, frente al Boulevard del mall, contará con marcas que no tienen presencia en la ciudad como H&M, que debutará con esta tienda en la región, Prune Rapsodia, American Eagle y Top Shop, entre otras. Además, contará con un Jumbo.
Según el ejecutivo, la obra contempla una superficie de 63 mil m2 con cuatro niveles comerciales -conformado mayormente por tiendas de vestuario femenino- dos pisos de dos niveles, y una torre de 12 pisos destinada a vivienda.
Pese a la apertura de la ampliación del mall Marina, el ejecutivo no descarta la posibilidad de seguir creciendo. "Siempre estaremos abiertos a responder a los requerimientos que nuestros clientes de la región requieran", dice. "Hemos remodelado Marina, partiremos con la remodelación del Boulevard y siempre estamos atentos a incorporar las modificaciones necesarias para mantenernos en la vanguardia de los centros comerciales", agrega.
El conflicto
La construcción de la ampliación del centro comercial generó una disputa entre la Municipalidad de Viña del Mar y la sociedad desarrolladora, que provocaron casi dos años de paralización de las obras desde junio de 2015 a febrero de este año.
Esto, pues el Municipio señalaba que los permisos que tenía el mall para construir, estaban vencidos y por ende no podían seguir adelante con el proyecto. Frente a esto, la empresa ingresó un recurso de ilegalidad en contra del municipio, que detonó una batalla legal que finalizó en la Corte Suprema, en la que el tribunal ratificó un acuerdo entre las partes, dando luz verde a la continuidad de las obras.
El acuerdo contemplaba mitigaciones viales como la construcción de una pasarela hacia el boulevard del mall, una conexión subterránea entre los estacionamientos, entre otras medidas.
