El director del Instituto Brasileño de Información en Ciencia y Tecnología, Emir Suaiden, ha incidido hoy en la importancia de combatir la denominada brecha digital en América Latina, ya que cree que la población que quede excluida de la sociedad de la información será "absorbida" por el narcotráfico.
Suaiden, en una entrevista con EFE durante su participación en un foro sobre estrategias de la industria cultural en la isla de San Simón (Pontevedra), en el noroeste españo, ha hablado de un "momento decisivo" en el que caben dos opciones: "o acercar a los excluidos a la sociedad de la información o que el narcotráfico se acerque a ellos y se los lleve".
Recuerda que en América Latina apenas un 20% de la población se puede considerar dentro de la sociedad de la información, donde "se habla mucho de producción científica, de patentes, de calidad de vida", y en contraste, al "otro lado de la orilla", lo que impera es "la inseguridad, la industria del crimen y los secuestros".
"Hay que construir un puente para llevar a los excluidos a ser incluidos, o de lo contrario nos tendremos que acostumbrar a la violencia", ha proclamado el también profesor de la Universidad de Brasilia.
Sin embargo, es consciente de que hay "mucho tiempo perdido" que ahora en Brasil, al calor de su eclosión económica -el índice de desempleo es del 6%-, se intenta recuperar.
Recuerda que en la sociedad de la información queda "mucha gente" que ni siquiera ha llegado a "la revolución de Gutenberg", porque "no sabe leer, escribir ni interpretar un texto", y que incluso "los pocos" que llegan a la universidad o a las bibliotecas "son dependientes de los libros, y no son capaces de crear".
Pese a todo, aprecia cambios considerables en su país, uno de ellos especialmente llamativos: "por primera vez los cerebros están volviendo de Europa y de Estados Unidos", subraya.
Una de las razones, según explica, es que en la etapa de Lula da Silva "se empezó a pagar bien a los profesores. Hoy no tenemos necesidad de salir de Brasil para dar clases", añade.
En lo que a la industria cultural se refiere, recuerda que el Gobierno viene implementando el modelo mixto público privado y los incentivos fiscales, ya sea en la organización de eventos o en la contratación de investigadores.
"Por primera vez en Brasil la empresa habla con la cultura. Eso es muy importante para nosotros", ensalza Suaiden, quien cree que en otros entornos económicos más regresivos también es factible esa sinergia.
Pero más allá de la cultura como motor económico, Suaiden hace hincapié en la importancia de considerarla como una prioridad en la vida pública, y se remite a un dato: "en toda América Latina, los ministerios con menos presupuesto son los de Cultura".
Destaca el caso concreto de Paraguay, donde la directora de la Biblioteca Nacional no tiene sueldo, trabaja como voluntaria, y los "libros más importantes" del país están en bibliotecas de Washington y Londres,concluye.
