Este sábado los chilenos dormiremos una hora menos, ya que comenzará a regir el horario de verano, es decir, a la medianoche los relojes deberán adelantarse en una hora. Contrario a lo que podría pensarse, dicha modificación no traerá consecuencias en el organismo de las personas, como señala el especialista en Neurofisiología del Sueño de la Universidad de Chile, Ennio Vivaldi.

El experto sostiene que "el impacto en el reloj biológico que tiene el cambio de hora de una hora es bastante menor. Si bien el hecho que nos quiten una hora genera problemas de sueño, generalmente son transitorios".

A renglón seguido, Vivaldi puntualizó que en las personas que sí presentan trastornos, el cambio de horario podría generar efectos sobre el sueño. "Hay personas que tienen dificultarse para adaptarse a los cambios de horario (...) hay gente que tolera el cambio con mayor o menor facilidad", dijo.

Vivaldi sostiene que los cambios de hora significativos son aquellos que contemplan varias horas y cambios de usos horarios, como el jet lag o para aquellos trabajadores cuyo régimen se basa en turnos.

"El peor cambio de hora es cuando se anticipa la llegada de la noche. Eso podría tener algún efecto, porque oscurece más temprano", agrega el especialista. En ese sentido, destaca que existe un efecto entre la luz y el ánimo de las personas. En este caso, durante el día habrá más sol y se oscurecerá más tarde.