El Centro Cultural Borges de Buenos Aires acoge la exposición Darwin en Argentina, una muestra histórica y fotográfica que pretende rendir homenaje al naturalista inglés.
La exhibición forma parte de las numerosas actividades organizadas en todo el mundo con motivo del llamado El año de Darwin, ya que en 2009 se cumplen 200 años del nacimiento del científico y 150 de la publicación del Origen de las Especies, su más célebre estudio.
Esta muestra, inaugurada ayer y que estará abierta al público hasta el 9 de septiembre, es un reconocimiento a las investigaciones que Charles Robert Darwin realizó durante su estancia en Argentina.
La exposición se divide en cinco áreas: Darwin en Argentina; el viaje de Darwin por la Patagonia; la Teoría de la Evolución; el Beagle, navío especialmente famoso por su segundo viaje, en el que Charles Darwin adquirió los datos y observaciones necesarias para elaborar su Teoría de la Evolución; y una última, que explica el pensamiento del inglés sobre otros aspectos culturales.
El científico, que se embarcó en 1831 en la nave H.M.S. Beagle para iniciar una expedición alrededor del mundo que duraría cinco años, exploró Argentina entre 1833 y 1835.
"Determinante para toda mi carrera, el viaje del Beagle fue, con creces, el acontecimiento más importante de mi vida", escribió Darwin sobre su experiencia.
En este país, durante sus viajes por Buenos Aires y la sureña Patagonia, Darwin descubrió y confirmó teorías que incluiría más tarde en El Origen de las Especies.
"Podemos concluir que toda la extensión de las pampas es una inmensa necrópolis de gigantescos cuadrúpedos extintos", apuntó el científico durante la exploración.
Además de analizar las características de la flora y la fauna, los fósiles y los aspectos geológicos de Argentina, Darwin se interesó especialmente en las costumbres de los habitantes del país.
"Los gauchos (habitantes del campo) son superiores a los de la ciudad. El gaucho es servicial, cortés y hospitalario, nunca he visto ejemplo de grosería", concluyó Darwin.