"Sobre eso no me pronuncio, pero nosotros somos y hemos sido muy atentos y respetuosos a lo que el poder civil establezca". Con esas palabras se refirió el cardenal arzobispo de Santiago, Ricardo Ezzati, al rechazo de la demanda civil interpuesta por tres víctimas del sacerdote Fernando Karadima.
El prelado también señaló que los afectados "están en su derecho", respecto de la apelación que interpusieron, y manifestó estar "siempre dispuesto a dialogar".
Estas declaraciones las efectuó este jueves, tras el acto en que el Arzobispado de Santiago dio inicio al Año Judicial Eclesiástico. En dicha cita, entre otras materias, se presentó un proyecto que busca agilizar y hacer gratuitos los procesos de nulidad matrimonial.
Ezzati también se refirió a otros temas de contingencia. Por ejemplo, respecto de los dichos del alto comisionado de la ONU para DD.HH., quien en Ginebra manifestó su preocupación (a través de un video) por el hecho de que en la Región de La Araucanía "se está usando la fuerza y otros abusos contra miembros de grupos indígenas".
El cardenal sostuvo que "el pueblo mapuche tiene un alma pacífica. Requiere que sus derechos sean reconocidos, y que justamente el Estado sea quien intervenga en esto, no sólo el gobierno del momento".
Al ser consultado por la situación de los reos que fallecieron esperando el indulto presidencial en el penal Punta Peuco, el religioso manifestó que "la sociedad tiene el deber de administrar justicia de acuerdo a la gravedad de los delitos". Agregó que "la dignidad de la persona, cuando puede ser respetada, en situaciones extraordinarias como la que están viviendo esas personas, hay que atenderla".
En relación a la agenda del arzobispado, el vicario judicial, Jaime Ortiz de Lazcano, informó que "durante el año pasado 181 personas ingresaron su causa de nulidad matrimonial".