"El Santo Padre ha elegido a un pastor para la iglesia de Osorno y nosotros, como católicos, estamos muy en comunión con el Papa", manifestó ayer el arzobispo de Santiago, cardenal Ricardo Ezzati, frente a la designación de Juan Barros como nuevo obispo de esa diócesis.
Las críticas se encendieron tras el nombramiento del prelado, ocurrido el pasado 10 de enero. Juan Carlos Cruz, denunciante del caso Karadima, apuntó al obispo electo como supuesto "encubridor" del ex párroco de El Bosque, quien fue condenado por el Vaticano por abusos sexuales.
El pro vicario pastoral de la diócesis de Osorno ya ratifica que la toma de posesión canónica de Juan Barros será el próximo sábado 21 de marzo, a las 11 horas, en la catedral de esa ciudad.
Ezzati se refirió ayer a este tema, en la casa central de la U. Católica, después de la ceremonia de juramento del nuevo período de su rector, Ignacio Sánchez (ver nota pag.30). "Yo he conversado varias veces con él (obispo Juan Barros), acogiendo sus inquietudes, sus sentimientos. Y espero que haya asumido y siga asumiendo lo que el Papa le ha pedido. Y una vez que asuma, también los obispos vamos a ser hermanos, como lo hemos sido siempre, apoyando lo que haya que apoyar", dijo el presidente de la Conferencia Episcopal de Chile (Cech).
Agregó que "por supuesto que me duele inmensamente que se haya creado esta situación. Comprendo y busco comprender el sentimiento de las personas. A algunos que me han escrito personalmente les he contestado en ese tono de comprensión". "Sin embargo -destacó-, aquí nos encontramos frente a una decisión de la Santa Sede, del Papa, que ciertamente ha discernido todo esto y ha decidido en consciencia sobre lo que había que hacer".
Dos temas
Respecto de la relación de Barros con el caso Karadima, el cardenal Ezzati indicó que "no hay que unir las dos cosas. El Santo Padre ha tenido en sus manos la tarea de discernir el bien de una comunidad y nosotros adherimos a lo que ha decidido".
En cuanto a la forma como fue propuesto el nombre del obispo Barros al Papa Francisco, el arzobispo apuntó que "yo no tengo nada que proponer. Si el santo Padre me pidiera una opinión, se la daría. Pero es una tarea ordinaria de la Congregación de Obispos, del Vaticano, que tiene los méritos de toda la situación. Y ellos eligen en consciencia".
También trascendió que la Conferencia Episcopal estaría preparando un documento público sobre este tema, que sería dado a conocer la próxima semana.
Ayer, en tanto, apareció una publicación en el portal norteamericano "Crux", dependiente del medio Boston Global, haciendo referencia a lo que ocurre en la diócesis de Osorno. Allí dan cuenta de la polémica e informan que "al menos dos miembros chilenos de la jerarquía (de la Iglesia Católica) han pedido a Francisco rescindir el nombramiento".