Rodrigo Tello emprendió ayer vuelo a Turquía, luego de que fracasaran sus intentos por firmar en Universidad de Chile. Sin embargo, lejos de haberse archivado su caso, en el plantel universitario no quedaron conformes con la manera en que fue tratado el mediocampista, por parte del director técnico, Darío Franco, y Azul Azul.
Desde que se supo de la posibilidad de que el volante podía volver a la "U", muchos integrantes del plantel se entusiasmaron con su incorporación. Incluso, más de alguno intercedió ante los directivos para hacer un esfuerzo si era necesario para sumarlo.
Pero apenas se conocieron las declaraciones de Franco, en medio de la pretemporada en La Serena, en contra del ex seleccionado chileno, todo cambió. El mediocampista nunca más recibió un llamado de la concesionaria, por lo que finalmente decidió continuar su carrera en el fútbol turco.
"Todos teníamos la esperanza de que pudiera estar acá. En lo personal, estaba muy contento con la chance de que volviera. No sé qué sucedió, porque estaba fuera del país, pero es una lástima que no esté aquí", reconoció José Rojas, el capitán azul.
Quienes sí estuvieron desde el inicio de la pretemporada saben que todo se manejó muy mal. Y, en ese sentido, apuntan sus miradas a los dirigentes. "Nunca más los vimos decir que harían todo lo posible por recuperar a uno de los referentes. Creo que manosearon innecesariamente a Rodrigo. Y lo que dijo el técnico fue devastador", afirma uno de los referentes del plantel.
Otro futbolista de gran peso al interior del camarín azul no dejó de manifestar su sorpresa, porque nadie saliera a defender públicamente a Tello tras los dichos del entrenador argentino, que desde el primer momento se mostró contrario a su llegada, pues no lo tenía considerado en ningún puesto.
"Me parece que al menos pudieron salir a decir algo. Uno puede creer que Franco no lo conozca, pero Tello fue campeón dos veces en el club. Y merecía un poco de respeto de todos", expresó el jugador.
En medio de todo esto, Tello reconoció, al dejar Chile, que la posibilidad de regresar a la "U" sigue abierta: "No era lo que quería, pero sé que volveré algún día", manifestó.
Cuando más difícil se ponía la situación, una curiosa solución tomó el portero Paulo Garcés. Como Cobreloa no iba a pagar los 50 mil dólares que exigía Azul Azul por el préstamo, el arquero decidió poner dinero de su bolsillo para destrabar todo. Habrá que ver si la "U" deja en libertad a Garcés sin tener un reemplazante, ya que la opción del golero de Iquique Rodrigo Naranjo se enfrió.
Ayer arribó Juan Ignacio Sills, ex defensor de Vélez, quien ya se hizo los chequeos y en las próximas horas será presentado. Además, hoy podría quedar cerrado el fichaje del jugador de Unión La Calera Rubén Farfán.