La Agrupación de Familiares de Ejecutados Políticos envió una carta al Comandante en Jefe del Ejército, Juan Miguel Fuente-Alba, en donde piden que exija la renuncia inmediata del general Guillermo Castro a su cargo actual de Jefe del Estado Mayor del Ejército, por vínculos con la CNI.
La misiva hace alusión a declaraciones de Piñera, señalando que "de acuerdo a las palabras del Presidente de la República respecto de que 'ningún responsable de violaciones a los derechos humanos será parte de las Fuerzas Armadas o del Gobierno', es necesario que se les desvincule de inmediato de ambas instancias, lo que constituye para la Agrupación de Familiares de Ejecutados Políticos una exigencia ética que demandamos".
Dentro de la carta, Castro aparece vinculado en los casos de asesinatos de 22 personas en Paine. Además, reconoce haber estado presente en el Cuartel 2 del Centro Chena, donde se fusiló a 11 trabajadores ferroviarios.
Se afirma además, que el general figura en la lista de agentes de la CNI que el Ejército entregó a los tribunales cuando se investigó el asesinato de Tucapel Jiménez.
En el documento señalan que Castro, "desde los inicios de la dictadura militar, fue participante voluntario de las actividades criminales desarrolladoras por integrantes de las Fuerzas Armadas". Agrega además que es "inaceptable moral y éticamente" que un ex integrante de la CNI ocupe el segundo puesto más importante en el Ejército, en cuanto "la mayoría de los crímenes cometidos durante ese período se encuentran impunes".
"La permanencia en las filas del Ejército de los probables inculpados sólo contribuye a que continúe la falta de colaboración que las Fuerzas Armadas han mostrado con los tribunales", agrega la misiva.