Familiares de soldados iraquíes supuestamente asesinados por yihadistas de Estado Islámico irrumpieron hoy en el Parlamento de Irak, en Bagdad, para protestar por la lentitud en las investigaciones sobre las muertes.
"Los manifestantes atacaron una puerta en la Zona Verde del centro de Bagdad y consiguieron avanzar hacia el Parlamento", explicó el diputado Abdel Hussein al Musawi en declaraciones a la web "Al Sumaria News".
"Las familias exigen (...) llevar ante la Justicia a los funcionarios de seguridad responsables de la sangre de sus hijos", agregó.
Las fuerzas de seguridad entraron en el edificio para poner bajo control la situación, mientras comenzó una negociación con los manifestantes, según informó la prensa. El gobierno no hizo por el momento comentarios al respecto.
En junio, tras asaltar la base del Ejército iraquí en Tikrit -a unos 170 kilómetros al norte de Bagdad- insurgentes liderados por Estado Islámico (EI) supuestamente mataron a cientos de soldados. Informaciones no confirmadas elevan el número de víctimas hasta unos 1.700. Sus cuerpos nunca fueron encontrados.
Los combatientes de EI lograron hacerse con grandes partes del norte de Irak desde que comenzaron su ofensiva, a principios de junio.