El presidente de la asociación de familiares de víctimas francesas del vuelo AF447, cuyos 228 ocupantes fallecieron el 1 de junio, lamentó hoy que la decisión de Air France de sustituir las sondas de Thales en sus aviones Airbus A330 y A340 "llega demasiado tarde".
Christophe GuillotNoël señaló en una entrevista al portal de información especializada en seguridad aérea "Securvol", publicada hoy, que fue preciso un accidente como el del vuelo Río de Janeiro/París para que se aplicara "el principio de precaución", a pesar de que "el problema de las sondas era conocido desde hacía años".
En este sentido, y tras las constantes peticiones por parte de los sindicatos de pilotos, el pasado viernes la compañía aérea Air France anunció que cambiará las sondas de medición de velocidad Thales por las de la marca Goodrich, recomendadas por Airbus y por la Agencia Europea de Seguridad Aérea (EASA).
"Se sabe ahora que las sondas Thales están en el origen del accidente, ¿cómo puede el BEA explicarlo? Además a Thales y a Airbus les cuesta afirmar que no tuvieron ninguna responsabilidad en cuanto a las sondas. Del mismo modo, Air France deberá explicar el hecho de que no siguieran la recomendación de cambiarlas", agregó.
El presidente de la citada asociación, que desconfía del Organismo de Investigación y Análisis (BEA) "pues los intereses económicos son muy importantes", afirmó que creerán los informes de su propio experto independiente.
"Vamos a organizar próximamente una rueda de prensa con nuestros expertos para informar a la opinión pública, lejos de los discursos políticos o complacientes, pues a veces se olvida que hubo 228 víctimas", agregó.
En cuanto a la relación con Air France, GuillotNoël indicó que el director general de la compañía, PierreHenri Gourgeon, sólo les envió una contestación "insuficiente", remitiéndoles a los informes del BEA, como toda respuesta a las cuestiones que le han dirigido.