Los precios de los alimentos llegaron a un nuevo nivel récord, de acuerdo con el índice de precios actualizado que dio a conocer hoy en su sede de Roma la Organización de la ONU para la Agricultura y la Alimentación (FAO).
El encarecimiento que se produjo entre diciembre y enero es el mayor tanto en términos nominales como reales jamás registrado desde que la ONU comenzó a realizar las mediciones de precios de los alimentos en 1990, y el séptimo consecutivo, alertó la FAO. En enero se incrementó el coste de todos los grupos de alimentos excepto la carne.
El índice, realizado en base a una canasta de commodities, llegó a 231 puntos en enero, un 3,4% más que en diciembre.
"Los nuevos datos muestran que no cede la tendencia al alza en el precio de los alimentos", señaló Abdolreza Abbassian, economista y experto de la FAO en mercados de grano.
Todo indica que los precios seguirán subiendo en los próximos meses, en detrimento sobre todo de los países más pobres con déficit alimentario que ya tienen muchas dificultades para importar suficiente comida. Al igual que los hogares de menores ingresos, en los que la mayor parte del gasto se va en alimentos, según Abbassian.
"El único factor positivo procede de una serie de países donde, gracias a buenas cosechas, los precios domésticos de algunos alimentos se mantienen bajos comparados con los precios internacionales", añadió el experto.
Los precios del aceite, oleaginosas y la grasa subieron un 5,6% y se ubican en el nivel récord de 2008, un año con enorme déficit de producción. Los lácteos aumentaron un 6,2% y el azúcar un 5,4%.