Las velocidades de internet y las tecnologías cada vez más avanzadas de los dispositivos móviles han facilitado la vida de los usuarios ultra conextados y dependientes de estos aparatos. Pero ¿qué ocurre cuando esta tecnología es utilizada en su contra, sin su permiso ni conocimiento?
De acuerdo al Wall Street Journal el FBI estaría interviniendo en los dispositivos móviles Android activando sus micrófonos a distancia en búsqueda de información que los lleve a detectar sospechosos de terrorismo, pedofilia o delincuencia.
La filtración provino de un ex funcionario anónimo, quien además indicó que ni Google ni el FBI estarían pensando confirmar la información. La fuente apunta a la existencia de la Unidad de Operaciones a Distancia, un grupo especializado que instala un software vía USB en el caso de los computadores y a través de internet en los móviles. En este último punto, es el usuario quien descarga un programa de la red al hacer clic en un enlace enviado por correo electrónico.
Evidentemente la noticia abre un nuevo debate sobre la privacidad y seguridad de los aparatos que ocupamos a diario, teniendo en cuenta que para realizar este tipo de prácticas, el organismo necesita una orden judicial la que en este caso, no existe.
Recordemos que el caso no es aislado: ya se habló de ello luego del lanzamiento de Kinect con Xbox 360 cuando se pensó que la cámara estaría siempre encendida y Kinect 2.0 de Xbox One con su micrófono. Esto, sin olvidar al recién lanzado Moto X, que también tendrá esta función activada esperando que el usuario le de instrucciones.
FUENTE: The Wall Street Journal