Dice "dictadura" para aludir al régimen de Augusto Pinochet, aunque su padre Miguel Kast fue ministro del fallecido militar y uno de los referentes del gremialismo. Fundador de Evópoli, uno de los ex jefes de campaña de Evelyn Matthei y diputado electo por Santiago, Felipe Kast asegura que tras la derrota de la derecha se debe iniciar una profunda reflexión y dar paso a nuevas generaciones para que "se tenga una nueva oportunidad". Sin embargo, advierte que el principal lastre del sector no es la imposibilidad de tomar distancia de Pinochet, sino que "su falta de diversidad".
¿Por qué perdió Evelyn Matthei?
Perdió porque a la centroderecha le faltó política, una cohesión y densidad ideológica en un momento en que el país requería una respuesta a demandas sociales muy fuertes. Faltó liderazgo político para sostener que no bastaba con el gobierno de los mejores. Desde que asume Sebastián Piñera hubo mucho trabajo de gestión y hubo mucho menos trabajo de reflexión sobre cómo proyectar este trabajo a más años.
¿Quiénes son los responsables de ese déficit: el gobierno o los partidos?
Todo aquel que tiene liderazgo en el sector tiene que asumir su responsabilidad. Acá hubo personalismos y todos pudieron haber hecho más en el plano de la generosidad para que primara algo colectivo.
¿La eventualidad de una reelección del Presidente Piñera jugó en contra de la candidatura de Matthei?
Creo que le jugó en contra, pero no tanto por responsabilidad del Presidente Piñera, sino que por la lectura que otros hicieron de aquello. Esa lógica hizo que personas como Manuel José Ossandón tomara distancia y se generaran divisiones. El Presidente debió haber sacado el factor del 2017 para que personas como Ossandón u otro no monopolizaran la discusión sobre una disputa de poder.
¿Esta derrota será factor de recambio y refundación para la derecha?
La derrota contundente te obliga a hacer una reflexión urgente y espero que los partidos tengan la visión de dar paso a las nuevas generaciones. El desafío más importante es dar identidad al sector.
¿Existe esa voluntad de recambio en los líderes de la derecha?
Matthei la tuvo y muchos otros dirigentes no tienen esa misma convicción. Por lo mismo, la nueva generación no tiene que esperar que les regalen esos espacios, sino que tienen que tomárselos. El gobierno de Piñera va a tener mejor lejos que cerca y, por lo tanto, en la medida que se articule esta generación con un punto de vista político nítido, inclusivo y propositivo se abre una nueva oportunidad.
Evópoli tomó la decisión de avanzar para constituirse como una tercera vía en la derecha. ¿Qué los diferencia de RN y la UDI?
Tenemos una experiencia común que es el gobierno de Piñera. Los partidos no tenían una gran cantera de personas que pudieran entrar al gobierno, así que hubo mucha gente independiente. Lo segundo, es que tenemos una mirada más inclusiva de la sociedad, creemos que la libertad no es un valor solamente en lo económico, sino que también en cómo se vive la vida.
¿La adhesión a Pinochet y el gobierno sigue siendo el gran factor de contención de crecimiento de la derecha?
No creo que sea el factor más relevante. El más relevante tiene que ver con la poca diversidad del sector, en términos de miradas valóricas y realidad socioeconómica, personalismos. A estas alturas es bastante fácil sin renunciar a tu historia hacer un relato de ella positivo. Tienen mucho mérito aquellos que revisan su historia sin complejos. El talón de Aquiles de la derecha no es su respaldo a la figura de Pinochet, sino que su falta de diversidad como sector.
¿Aciertan quienes sostienen que Evópoli se siente más cercano de Andrés Velasco que de Jovino Novoa y Carlos Larraín?
Con Velasco tenemos muchas coincidencias, aunque creo que está en el lugar equivocado: en la Nueva Mayoría su voz es menos escuchada. El representa para muchos de nosotros una forma de hacer política y de contenidos con los cuales nos sentimos muy cómodos. Así que sí, somos probablemente más cercanos a Velasco que a Novoa y Larraín en términos de contenido programático.
Han dicho que son una alternativa a la UDI y RN. Sin embargo, algunos personeros de esos partidos han renunciado para fichar por Evópoli….
Eso es inevitable que ocurra. Pero lo importante es que podamos mostrar la generación de esta tercera fuerza no como suma cero, sino como una nueva tienda que le pueda dar espacio a gente que quiere tener un nuevo proyecto político: con experiencia de gobierno, liberal y de corte generacional. Aquí habemos personas que no vivimos la dictadura y que sentimos que tenemos algo que decir.
¿Ustedes ven con simpatía la reelección de Piñera en 2017?
No vemos con simpatía ninguna discusión sobre reelecciones a esta altura. Si seguimos discutiendo quién será el próximo candidato vamos a perder una oportunidad histórica de tener una reflexión sobre qué es lo que nos une. No nos vamos a prestar para ser instrumental a ninguna candidatura.
