Proteger a los futbolistas de faltas violentas será la prioridad para los árbitros en el Mundial de Brasil, por encima de otros temas polémicos como las simulaciones, los toques con la mano o el triple castigo.

El fútbol se ha vuelto mucho más violento dentro de la cancha en los últimos años, según observadores, y la FIFA dijo el jueves en un evento de preparación para los árbitros mundialistas que quería evitar esa cuestión.

"Siempre hay cosas que nos dicen que observemos, mucho más cuando se trata de proteger a los jugadores del juego brusco, el juego con faltas y el juego violento, y también de proteger la imagen del deporte", dijo a periodistas el inglés Howard Webb, árbitro de la final del Mundial 2010.

Massimo Busacca, jefe del departamento de arbitraje de la FIFA, dijo que los árbitros que acudan al Mundial, que comienza el 12 de junio, tendrán instrucciones de erradicar cualquier señal de juego brusco.

"La seguridad de los jugadores es muy importante, así que los árbitros tienen que leer la situación con cuidado al inicio del partido", sostuvo Busacca.

"Si los jugadores empiezan a cometer ese tipo de faltas (violentas), tenemos que tomar acciones para evitarlas. Tenemos que decir: 'No queremos ese tipo de fútbol en esta competición'", agregó.

Busacca destacó la importancia de los árbitros en esa tarea.

"Ese es el rol del árbitro, tratar de entender y anticiparse. A veces, los jugadores se olvidan debido a la adrenalina. El rol del árbitro es decir: 'Quiere jugar o quiere ir a darse una ducha?'", señaló.

"Tenemos que tratar de evitar esas situaciones que pueden destruir el fútbol", añadió.

Aunque la simulación de faltas es considerada por muchos como el flagelo del deporte, Webb dijo que es una preocupación relativamente pequeña para las autoridades de los partidos.

"Es una de las cosas que siempre nos piden a las que estemos atentos porque cuando no se identifica con precisión, puede tener un efecto dañino sobre el partido", indicó.

"También se está enviando a los equipos que van a competir un mensaje, alto y claro, sobre sus responsabilidades", remarcó.