En la jornada de ayer la autopsia al cuerpo del fiscal argentino Alberto Nisman arrojó que no hubo intervención de terceros en su muerte, sin embargo, la persecutora a cargo de la investigación, Viviana Fein, no descartó la posibilidad de que el suicidio haya sido "instigado".

A pesar de que el gobierno trasandino habló de suicidio esta mañana, Fein aseguró que se "va a investigar si hubo algún tipo de inducción o instigación a través de amenazas, ya sea a través de llamadas o mensajes de texto. Se ha secuestrado muchísimo material".

Asimismo, agregó que al momento "la causa está caratulada como muerte dudosa", y que por lo mismo no se puede decir que la causa esté "resuelta".