El fiscal nacional económico, Felipe Irarrázabal, tiene una hoja con los datos, consolidados, que puede revelar por ahora. Grafican la magnitud de la investigación iniciada en diciembre de 2014 y que terminó esta semana con una denuncia por colusión en el mercado del papel tissue entre 2000 y 2011; dos empresas -CMPC Tissue y SCA, ex Pisa- acogidas al programa de delación compensada, la primera sin multa, la segunda con una sanción rebajada, y al gobierno acelerando cambios legales y un gremio empresarial enfurecido por el daño a la imagen privada. Irarrázabal cuenta que la fiscalía cuenta con declaraciones de más de 20 ex ejecutivos de las empresas; 40 horas de testimonios grabados; 20 oficios solicitando información; un expediente que, sin incluir la información digital, ya completa más de 1.800 fojas.
"Han trabajado alrededor de 10 personas bastante focalizadas en este caso concreto durante un período de casi un año. En el último tiempo se ha llegado a alrededor de 15 personas. Entonces, esa idea de que la delación compensada es un paraíso es completamente equivocada: uno tiene que estudiar los antecedentes y asegurarse de que se está cumpliendo con el estándar legal", explica el abogado -nombrado en el cargo en 2010 por Sebastián Piñera y ratificado en 2014 por Michelle Bachelet-, antes de analizar el fallo de la Corte Suprema en el caso pollos y de detallar cómo se iniciaron las indagaciones en el mercado del papel higiénico, las servilletas, las toallas de papel y los pañuelos desechables.
¿CMPC decidió tomar la vía de la delación compensada o la sugirió la FNE?
No entiendo de dónde viene toda esta mitología sobre el origen de la investigación. Uno tiene que remecer el árbol. Hay algunas delaciones que llegan solas, como la de Tecumseh y Whirlpool, por los compresores, pero en este caso en concreto uno remece un poco el árbol a través de las investigaciones. También existen monitoreos sobre qué mercados podrían ser atractivos y hay que elegir. Aquí somos 100 personas y el costo de monitorear es altísimo.
¿Por qué escogieron este mercado?
Hubo un antecedente de un allanamiento en Colombia en este mercado, de pañales y papel tissue. Ese proceso aún no ha terminado. Nosotros estamos monitoreando qué pasa en el mundo, muchas veces los mercados tienen ciertas similitudes. Nos llamó la atención eso, abrimos los ojos.
O sea, el caso de Colombia fue el punto de partida…
El caso de Colombia nos apuntó un punto en el radar, pero no es automático. Nos ayudaba el hecho de que había actores similares, pero al parecer no se encontraron antecedentes que vincularan el cartel con Chile.
¿Qué los hace presumir que podría haber algo en Chile?
Se hacen reuniones, se recolecta información y al final había un cuadro que daba para pensar que podría ser interesante investigar. La mayoría de las veces, cuando nosotros abrimos una investigación terminamos cerrándola. Esta fue de oficio y se contactó a ex ejecutivos de CMPC, se hizo una labor de inteligencia en esa materia con datos públicos.
SCA dice que CMPC corrió con ventaja, que fue notificada en diciembre y SCA en abril. Y que el primer delator tuvo entonces información que ellos no tuvieron.
Aquí se pueden decir muchas cosas. A las dos empresas las notificamos al mismo tiempo…
SCA sostiene que el organizador y coaccionador de este cartel fue CMPC, lo que podría hacerles perder la exención de la multa. ¿Usted llegó a alguna conclusión respecto de aquello?
Hubo que hacer un allanamiento y después de eso se delataron, CMPC no tuvo allanamiento. Uno puede empezar con el juego de las siete diferencias, pero la delación compensada no es así, llega quien llega, como sea. Al parecer, aquí va a haber una controversia sobre esto. Y esa es una discusión que se tiene que dar, si es que da, frente al Tribunal de Defensa de la Libre Competencia.
Probablemente le pidan su opinión sobre este tema...
Si nos piden la opinión, como fiscalía tendremos que tener una opinión, pero ex ante es una cuestión que no está dentro de nuestra competencia, sino que está dentro de la competencia del tribunal.
¿En muchos de los testimonios que recogieron apareció el tema de la coacción?
Yo sigo representando como fiscalía el interés general. No me interesan los titulares, sino lo tangible, y tengo que privilegiar ganar los casos. En una delación compensada también hay que ganar los casos. La delación compensada tiene dos patas: primero, mete el germen de que su mejor amigo puede ser su peor enemigo, y puede ser del día a la mañana, muy rápido. El segundo es que el que aprieta el botón tiene que pensar que va a tener un blindaje.
Los hechos demuestran aquí que "los mejores amigos pasaron a ser los peores enemigos".
Y este es uno de los temas que se pueden discutir en el proceso y ahí vamos a ver qué posición adoptamos y hasta qué punto puede tener efecto no solamente respecto de esa discusión, sino que sobre la acreditación de los hechos. Nosotros tenemos que ser conservadores y enfocarnos en la evidencia en la prueba e ir viendo cómo se presenta el juicio.
¿Una colusión donde una empresa tiene el 75% del mercado y otra el 11% es un cartel equilibrado?
Yo no les pondría apellido a los carteles, los carteles son carteles. En los carteles que hemos visto, siempre las empresas tienen una disparidad de participación de mercado entre uno y otro. En esto de nuevo. Hay que tener cuidado con posibles cortinas de humo.
¿Colaboraron ambas empresas?
A mí no me gusta hacer contrastes, pero es difícil no hacerlo. Yo creo que CMPC hizo algo que, a nuestro juicio, perfecciona el sistema de libre competencia y hace que la economía de mercado en el futuro sea más sólida, más fuerte. SCA también lo hizo, con un allanamiento de por medio, pero lo hizo. Esto lo hemos dicho hasta el cansancio y es difícil de explicar, porque los políticos y la gente, que tienen una mirada de más corto plazo, quieren una sanción ejemplar en cada uno de los casos que ve: sin tener delación compensada, la posibilidad de tener un éxito sería muy difícil.
Ustedes dicen que fijaron precios. ¿Cuánto los subieron?
Ese tema lo vamos a revelar en el procedimiento mismo.
¿La FNE indaga otras categorías de productos en las que participa CMPC, como los pañales, donde son investigado en Colombia?
La Fiscalía no se refiere al contenido de sus investigaciones o sus potenciales investigaciones.
"El Ejecutivo no sabía..."
¿Le informó al gobierno que venía este caso? ¿No es lógico alertarlo sobre este escándalo?
No, porque aquí está en juego la autonomía y la seriedad de la FNE. Esto no se puede enredar con cálculos de qué efectos se producen. Si la FNE ha sido exitosa es porque ha asumido que es autónoma y eso le ha generado una responsabilidad. Yo no he pasado malos ratos con esto...
¿A qué se refiere? ¿A que no ha recibido presiones?
No he pasado malos ratos en el sentido de que el Ejecutivo haya de alguna forma sugerido que el asunto funcione de manera distinta.
¿No le pareció prudente informarlo antes de la reunión entre la Presidenta y Eliodoro Matte, cuando se reunieron en el CEP? Esa imagen ha sido criticada en el oficialismo...
Lo que le puedo decir, de nuevo, es que, en cumplimiento de la ley, el Ejecutivo no sabía que esta investigación estaba en camino. El Ejecutivo no sabe cuando nosotros decidimos que una investigación está lo suficientemente madura y eso lo entendieron los ministros de Economía con que me ha tocado trabajar, tanto en este gobierno como en el anterior.
Y de parte del sector privado, o las empresas indagadas, ¿ha recibido algún tipo de presiones?
No, eso sería muy impertinente, porque existe autonomía de parte nuestra con los investigados. Nosotros también hemos investigado al Estado, como en el caso de la Dirección General de Aguas, una entidad que depende del MOP. Los demandados pueden ser tanto empresas como sector público. Tenemos conciencia de que tenemos que vivir en la soledad. Las decisiones las tomamos porque creemos que se fundamentan técnicamente en que un proceso está maduro, los sectores los elegimos nosotros, los posibles casos los elegimos nosotros y en esa materia tampoco recibimos ayuda. Pero cómo tramitamos las denuncias, cuáles son las preferencias, eso es parte del know how interno de la fiscalía y tiene que ser una cosa muy autónoma.
¿Se reunió con Eliodoro Matte?
No me gusta hablar sobre cuestiones que podrían estar en el expediente, pero la respuesta es no. No me he reunido con Eliodoro Matte.
Las colusiones
¿Por qué presentan requerimientos contra empresas y no contra personas?
El DL 211 tiene una inclinación natural hacia una persecución a las empresas. Tampoco es un invento chileno: es un giro que hizo el país en 2003 hacia una normativa más europeizante. En Europa, las multas son focalizadas en las empresas. La delación compensada ha sido muy eficiente en Estados Unidos y Europa, pero no en muchos otros países. Está dicho en la guía nuestra y en el nuevo borrador es más preciso todavía: los casos de delación compensada incluyen a todos los ejecutivos, empleados y asesores, y ex ejecutivos y ex empleados. El que obtiene el beneficio del cartel es la empresa, y la empresa es, entre comillas, sus accionistas y sus ejecutivos, que son los que ejecutan las acciones de las empresas. El DL 211 chileno tiene un foco en las empresas, pero ha habido casos contra personas naturales, como el caso de los doctores de Chillán, donde cada uno de los doctores es un competidor en sí.
¿Las colusiones las cometen los ejecutivos y nos los dueños de las empresas?
Depende de los hechos y la evidencia. La experiencia internacional está más focalizada en el ejecutivo, que es quien ejecuta. También es cierto que quienes pagan la cuenta son los accionistas, pero normalmente uno tiene que buscar los hechos y un nombre y un apellido que estén conectados con los hechos, y normalmente quienes dejan rastro de eso son las personas que ejecutan.
¿Hay una tendencia también en las empresas a establecer diques de contención hacia directorios y accionistas?
Es difícil que tenga esa perspectiva, porque estoy en este lado de la trinchera. Yo me imagino que si uno es director se preocupa de tener programas de compliance, y no esta tan en el día a día de la compañía, porque los directores no están para administrar la compañía, para eso está la gerencia. Uno tiene que basar su imputación y el requerimiento en la evidencia y los hechos.
¿Le parece justo que haya exención de multa cuando alguien se delata cuando ya la fiscalía ha iniciado una investigación?
No es un tema de justicia, sino que de eficiencia. Hay legislaciones que tienen diferencias entre una y otra cosa. Aquí estamos diciendo expresamente que puede haber facultades intrusivas de por medio y aceptar una delación, después de ejercida la facultad intrusiva. La institución de la delación compensada no está en los parámetros de justicia o no justicia: está en meter en los carteles la posibilidad de que los mejores amigos se pelean a muerte y eso hace desestabilizar los carteles.
¿O es que es mucho más probable una delación cuando la fiscalía ha iniciado una investigación?
Es evidente que cuando inicia una investigación señaliza a los directorios y a los accionistas de que hay un interés, que estamos poniendo el ojo en algo y puede surgir una investigación interna que se traduzca en una delación.
Hay quienes proponen establecer sanciones distintas si una empresa se delata después de iniciada una investigación o antes…
Yo no creo que sea tan relevante. Con toda la tirria que yo les tengo a los carteles, porque van en contra de los consumidores y de la economía de mercado, esto es muy eficiente, no les establezcan tantos requisitos, tantas precisiones o cuestiones que impliquen muchos niveles de discrecionalidad.
¿Cuántos casos de colusión están investigando ahora?
Preferiría no dar una cifra y menos hablar de un caso concreto.
¿Hay mayor sofisticación en los carteles?
Por eso hablamos de los carteles 3.0. Inicialmente había carteles por escritura pública: un cartel desbaratado por la fiscalía contra las radios, incluida la radio Bío Bío, que fue por escritura pública, llegó a la Corte Suprema y se ratificó la sentencia. Después habría un 2.0, el caso pollos, donde es cosa de leer los emails. El empresariado tiene conciencia de que la FNE está dispuesta a ejercer sus atribuciones en los casos que lo ameritan. Hay que mirar la delación compensada desde el punto de vista de la eficiencia: es el delator el que nos ayuda a fortalecer o a completar el caso. El trabajo lo tiene que hacer uno, pero la diferencia es muy grande si nos dicen por dentro, desde la cocina, cuál es el menú, cómo se hacen los platos.
¿Qué señal esperan mandar con este caso?
Tenemos que lograr -y por eso hemos tenido una exposición mayor a la que nos gusta- explicar la delación compensada. Tenemos que explicar los incentivos, cómo funciona, cómo opera. Nosotros celebramos que grupos económicos grandes estén haciendo delaciones compensadas. Van a tener un sacrificio en relación con los casos, porque implica una confesión, pero la foto de Chile en unos años más, si la figura de la delación compensada está funcionando, va a ser distinta.
¿El mayor daño es reputacional en estos casos?
No nos pida a nosotros medirlo. Son otras instituciones las que se deben preocupar de eso. A nosotros nos interesa que en Chile exista economía de mercado, que los carteles que existan sean más inestables y terminen más rápido. Si el mundo político está tan obsesionado por la justicia de este caso concreto y está dispuesto destruir sistemas de incentivos sofisticados como la delación compensada, le estamos haciendo un flaco favor al sistema de libre mercado. Al delator hay que recibirlo, hay que perdonarlo, y eso es lo que hace la ley a través del blindaje.
El juicio público y empresarial es lapidario. ¿Usted está por una mirada más piadosa versus una opinión pública más severa?
No me malinterprete: cuando usted lee el requerimiento ve que hemos sido crudos en describir las cosas tal cual. Lo que digo es que la delación compensada es el mecanismo para desbaratar carteles y eso requiere que sigan habiendo buenos incentivos para que las empresas decidan delatarse. Tenemos que hacer avances significativos e ir de menos a más y eso es lo que está ocurriendo. La delación compensada llegó para quedarse. Hagamos que este caso permita más delaciones.
¿Habrá más delaciones después de este caso?
Como política pública es deseable que sea así, que este caso incentive a los empresarios que tienen carteles a delatarse. Que exista un mecanismo de delación compensada les empeora el sueño y la tranquilidad a los empresarios que tienen un cartel. Nunca se nos va a acabar la pega. Con régimen sancionatorio, incluso con prisión, va a haber carteles igual y va a seguir siendo así. No nos pidan que no existan carteles, pídannos que podamos desbaratarlos.