La Fiscalía Estatal de Dortmund acusó hoy de intento de homicidio al joven ruso-alemán de 28 años que perpetró el atentado contra el bus del Borussia Dortmund el pasado abril.
Según un comunicado de la fiscalía, Sergej W. está también acusado de un delito de lesiones graves y otro de ejecución de un ataque con explosivos por el atentado con tres bombas en el que resultaron heridos un policía y el jugador español Marc Bartra.
Los investigadores acusan al sospechoso de haber detonado los explosivos con el objetivo de que las acciones del Dortmund -el único club alemán que cotiza en bolsa- se desplomasen en el mercado, sobre las que había hecho una fuerte apuesta a la baja.
En concreto, la fiscalía indicó que el detenido había comprado el día del atentado un total de 15.000 opciones de venta sobre acciones del equipo con un crédito de varias decenas de miles de euros adquirido ex profeso la semana previa.
Las opciones de venta dan a su poseedor el derecho, aunque no la obligación, a vender un activo a un precio predeterminado dentro de un período de tiempo concreto; y obligan a su vendedor a recomprar al precio pactado, independientemente de cómo haya oscilado la cotización hasta el momento.
El sospechoso fue detenido diez días después del ataque y desde entonces se encuentra en prisión preventiva.
El 11 de abril, se registraron tres explosiones al paso del bus del Dortmund en su camino al estadio, donde tenía previsto enfrentarse al Mónaco en el partido de ida de cuartos de final de la Liga de Campeones. Como consecuencia de la explosiones, el defensa Marc Bartra sufrió la fractura del radio del brazo derecho, de la que tuvo que ser operado y estuvo mes y medio de baja.
En un primer momento se apuntó hacia un "trasfondo terrorista", pero las pesquisas policiales llevaron a la detención de Sergej W.