Juan Tralcal Quidel es uno de los 11 acusados de la muerte del matrimonio Luchsinger Mackay, que ocurrió el pasado 4 de enero de 2013 luego de que su casa en Vilcún fuera el blanco de un ataque incendiario.
El pasado 30 de diciembre, la Corte de Apelaciones de Temuco decidió que Tralcal y otros cuatro imputados regresaran a prisión, luego de revocarles el arresto domiciliario total.
Ayer, un equipo de la Brigada de Investigaciones Policiales Especiales (Bipe) de la PDI recibió la orden de detener a todos los acusados, la que se llevó a cabo a las 10.30 h.
Cuatro de ellos fueron encontrados durante el día por la policía, no obstante, al llegar a la casa de Tralcal no hallaron ningún rastro de él.
"Se despachó una orden de detención en contra de las personas y la PDI hoy fue a hacerla efectiva. Respecto de tres de los imputados (Sabino Catrilaf, Eliseo Catrilaf y Aurelio Catrilaf) fueron habidos en sus domicilios, donde tenían que cumplir el arresto domiciliario, y fueron detenidos y trasladados a la cárcel de Temuco. Un cuarto imputado (Sergio Catrilaf) no estaba en su casa, pero se presentó solo en la cárcel de Temuco durante la tarde", explicó ayer el fiscal Roberto Garrido.
Y añadió: "Tralcal no estaba en su domicilio. Según la información que dieron sus familiares, se había ido a trabajar al norte y en este momento está incumpliendo la medida cautelar, por lo que tiene una orden de detención pendiente".
Sobre si el acusado está prófugo, el persecutor explicó que "normalmente esa condición se da después de cierto tiempo de no ser habido y entra a un registro nacional. Eso aún no ha pasado.
Pero, en términos más simples, lo está. De hecho, él debía estar en su casa y no estaba".
Garrido agregó que "se están haciendo diligencias para dar con su paradero".
Fuentes de la PDI indicaron que cuando llegaron al domicilio de Tralcal éste se encontraba vacío. Los vecinos del lugar indicaron que el imputado manifestó que se trasladaría hasta la zona norte de La Araucanía para recoletar frutas y así obtener dinero para poder pagar sus abogados. Según la información que maneja la Bipe, Tralcal habría abandonado su casa entre el 30 de diciembre y el 1 de enero.
En este momento, todas las unidades policiales PDI del país están en alerta para dar con su paradero.
Machi regresa a su casa
Durante la mañana de ayer, en tanto, abandonó el Hospital Intercultural de Nueva Imperial la machi Francisca Linconao.
La mujer continuará bajo la medida cautelar de arresto domiciliario total y arraigo nacional, a la espera del juicio por la muerte del matrimonio Luchsinger Mackay.
Mediante un comunicado, la familia de Linconao informó que ella fue trasladada a su domicilio en el sector Rehue, Padre Las Casas, donde continuará su proceso de rehabilitación tras dar por finalizada su huelga de hambre que duró 14 días.
La autoridad reliogiosa mapuche fue llevada hasta su casa en una ambulancia y no hizo declaraciones a la salida del centro asistencial.
El que sí habló fue el doctor Enrique Morales, del departamento de Derechos Humanos del Colegio Médico, quien junto al director del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH), Branislav Marelic, informó del estado de salud de Linconao: "Actualmente pesa 41 kilos y su diagnóstico incluye desnutrición, gastritis crónica y una osteoporosis avanzada".
Añadió que el equipo que evalúa a Linconao está integrado por "tres médicos mapuches, que han accedido a que ella sea trasladada a su domicilio, en donde seguirá con las observaciones médicas". Asimismo, Morales dijo que la recuperación de la machi será un proceso difícil debido a su bajo peso y su avanzada edad.
"Es muy importante que ella inicie su recuperación en su domicilio, desde el punto de vista de la cosmovisión, porque ella recibe su energía espiritual desde su espacio", recalcó el médico.
Por su parte, el director del INDH precisó que el rol de la entidad que encabeza es velar por el debido proceso. "Desde un primer momento hemos recordado al Estado cuáles son sus obligaciones en un Estado de derecho, esto no se contradice de ninguna forma con la persecución eficaz de los delitos", apuntó Marelic.
Pese al revés sufrido en la Corte de Apelaciones, desde la Fiscalía de La Araucanía señalaron que aún no descartan presentar un recurso para que la machi vuelva a la cárcel.
Continúa protesta
Con el arresto domiciliario de la machi Francisca Linconao se cumplió una de las tres condiciones que otros cuatro comuneros, imputados por supuestos delitos de violencia rural, habían impuesto para deponer su huelga de hambre.
Luis Tralcal, Benito Trangol, Alfredo Tralcal y José Tralcal iniciaron esta protesta el pasado 28 de diciembre y están en prisión preventiva en la cárcel de Temuco. Entre las demandas que presentaron ante Gendarmería se cuentan el retiro de la Ley Antiterrorista en sus causas y que se desarrolle un juicio justo.
Los informes médicos que la entidad penitenciaria ha hecho llegar hasta los tribunales señalan que los imputados "se niegan a tomar exámenes médicos, según protocolos".
Los documentos, además, indican que el comunero que ha perdido más peso es Benito Trangol, quien en la primera semana adelgazó 4,5 kilos.