En el 7º Juzgado Garantía de Santiago, el fiscal de la zona metropolitana centronorte, Leonardo de la Prida, formalizó a los ejecutivos de Metrogas Attilio Botto Zapelloni, jefe de proyectos externos y Danilo Garrido Reyes, encargado de Fonored, por los delitos de cuasidelito de homicidio y cuasidelito de lesiones graves de tres personas que fueron víctimas de un intoxicación por gas el 1 de julio del 2007.
Ese día, Wenceslao Ducaud, su esposa Graciela Chacón y su hijo Leonardo Ducaud resultaron intoxicados por emanación de gas cuando dormían en su casa ubicada en calle Sierra Bella 1439, comuna de Santiago. La pareja de ancianos murió días después después y su hijo quedó con secuelas graves.
Si bien en un inicio se determinó que todo fue un accidente, la fiscalía determinó que las muertes y las lesiones graves se produjeron por filtraciones en la red de cañerías de gas. Se estableció que maquinaria pesada que realizaba labores de repavimentación de la avenida Sierra Bella dañó las cañerías y que la empresa Metrogas no realizó las fiscalizaciones semanales.
Según el Ministerio Público, Attilio Botto y Danilo Garrido eran los funcionarios responsables de la inspección de obras en ese minuto.
Los imputados quedaron sin medidas cautelares y el juez Francisco Ramos estableció un plazo de investigación de 60 días y fijó una audiencia para discutir una posible salida alternativa para el 28 de agosto.