La sustracción de un camión de transporte de valores frente a La Moneda y el posterior robo de $ 2.400 millones, el pasado 27 de octubre, llevó a Carabineros y la fiscalía Centro Norte a detectar el bloqueo del sistema GPS del blindado de la empresa Brink's. También presuntas anomalías en los protocolos aplicados por ocho funcionarios de la firma.

En un informe remitido el miércoles a la Corte de Apelaciones de Santiago por la fiscal Macarena Cañas -que indaga este tipo de delitos de forma preferente- la investigadora ahonda aspectos, hasta ahora, desconocidos de la investigación.

Uno de los ocho funcionarios indagados por el Ministerio Público es el vigilante y conductor del camión robado M.A.L.H. El trabajador, según declaró a la policía, habría sido abordado en calle Morandé e intimidado con un arma mientras le exhibían fotografías de sus hijas.

Esta versión es indaga por el Departamento OS-9 de Carabineros. Las cámaras de vigilancia del sector y retratos hablados de los partícipes del robo son otras de las diligencias que efectúa la policía.

Incautación

Pese a la versión entregada por el funcionario a la fiscalía y la policía, el 28 de octubre nuevamente fue interrogado. Menos de 24 horas después de entregar su segunda declaración, un oficial de Carabineros concurrió a la casa del conductor, ubicada en la comuna de La Granja.

En ese lugar, detalla el documento, se le "solicitó la entrega voluntaria de teléfonos móviles y soportes de información como computadores", dice el informe remitido por la fiscalía. Este hecho llevó al vigilante a presentar un recurso de amparo contra Carabineros, el cual será analizado hoy por la Sexta Sala de la Corte de Apelaciones capitalina.

Fuentes de la investigación indicaron que la diligencia apunta a "determinar si se cumplieron los protocolos de seguridad" tras el millonario asalto. Asimismo precisan que "cada falla de los protocolos que se detectó se transforma en un blanco de investigación para descartar o confirmar su participación en los hechos".

En paralelo a la indagatoria para aclarar el rol del conductor en el robo, la fiscalía solicitó "además la entrega voluntaria de teléfonos móviles y soportes de información como computadores, autorización voluntaria para obtener acceso al tráfico telefónico de su teléfono móvil, entre otras diligencias, a ocho testigos empleados de la empresa de transporte de valores Brink's", y otros a dos funcionarios  de la maestranza donde fue encontrado el vehículo, ubicada en calle Carlos Salas Herrera.

Este último lugar fue donde un grupo de delincuentes descerrajaron la puerta del  camión blindado mediante el sistema de "oxicorte" y sustrajeron el millonario botín. Consultada la Fiscalía Centro Norte declinaron entregar una versión del tema.