Según la Fiscalía italiana, Francesco Schettino, quien estaba a cargo del barco "Costa Concordia" encallado en 2012, cometió numerosos errores tras la tragedia de la nave. 

"Schettino y su tripulación deberían haberse quedado en el Costa Concordia, hasta que el último pasajero ya no estuviera a bordo. En lugar de ello, decidió aprovechar su ventaja y huir del barco", dijo el fiscal Alessandro Leopizzi, hoy durante su alegato.

Leopizzi añadió que, además, el capitán de 54 años activó la alarma de forma vacilante y dio datos falsos a las autoridades. Schettino debe responsabilizarse ante un tribunal desde julio de 2013 por el accidente con 32 muertos.
 
Es acusado de homicidio culposo y lesiones corporales. El juicio continúa el lunes 26 de enero.  Se cree que la fiscalía pedirá una pena alta para el capitán. La condena podrá conocerse a principios de febrero.

El "Costa Concordia" encalló en enero de 2012 con más de 4.200 personas a bordo delante de la isla mediterránea de Giglio. De acuerdo con Leopizzi, Schettino no dio después del accidente indicaciones precisas para la evacuación del barco y ancianos y personas discapacitadas fueron abandonadas a su suerte.
 
"Se fue del barco sin mojarse siquiera las suelas de los zapatos", criticó el fiscal. Si bien Schettino reconoció en el proceso su responsabilidad, subrayó una y otra vez que fue su tripulación la que cometió los errores decisivos.