Fiscalía solicita la primera formalización por el caso cascadas

La Unidad de Delitos de Alta Complejidad de la Fiscalía Centro Norte, que dirige José Morales, solicitó ayer al Séptimo Juzgado de Garantía que fije una audiencia para realizar la primera formalización por parte de las transacciones cuestionadas por la Superintendencia de Valores y Seguros (SVS) en el denominado caso cascadas.

El organismo acusará a Aldo Motta, gerente general de Pampa Calichera y Norte Grande, de infringir el artículo 53, inciso segundo, de la Ley de Mercado de Valores, de modo reiterado. Ese artículo dice así: "Ninguna persona podrá efectuar transacciones o inducir o intentar inducir a la compra o venta de valores por medio de cualquier acto, práctica, mecanismo o artificio engañoso o fraudulento".

Motta (quien también es director de La Polar, cargo que dejaría esta semana) ya fue formalizado en enero por la supuesta falsificación de actas de directorio, proporcionando antecedentes falsos a la SVS. En esa causa, el tribunal fijó un plazo de 120 días para la investigación, pero la Fiscalía pidió la semana pasada una extensión de plazo que será vista en mayo.

Motta será por ahora el único imputado en esta formalización, pero la fiscalía analiza el rol del ex ejecutivo de Banchile, Cristián Araya, quien podría sumarse al gerente de las cascadas.

La SVS cursó en 2014 multas por US$ 164 millones en total contra Julio Ponce, presidente de SQM; Aldo Motta; Roberto Guzmán; Patricio Contesse Fica y Alberto Leblanc. Además, sancionó a LarrainVial, Leonidas Vial, Manuel Bulnes y Felipe Errázuriz. En esta arista de la causa no había declarado hasta ahora Julio Ponce. Lo hizo hace unos diez días ante Morales y habría declarado que Motta era quien definía las modalidades que se emplearían en cada una de las operaciones cuestionadas.

Las transacciones

Morales sustentará su acusación en cinco grupos de transacciones. Y aunque la SVS acusó irregularidades en varias otras operaciones, la fiscalía decidirá las acusaciones por esas compraventas cuando reciba el peritaje que se encomendó a la Universidad Católica de Valparaíso, en octubre. Las operaciones cuestionadas en la formalización pedida ayer implican compras de acciones SQM-A o SQM-B por parte de Pampa Calichera, la posterior venta a terceros y luego su recompra. Calichera perdía dinero, pero obtenía una ganancia contable que le permitía distribuir dividendos a la cascada. Las transacciones cuestionadas son las siguientes:

1 Operación Linzor.

Transacciones ficticias, según la Fiscalía, que generaron una utilidad ficticia de US$ 251 millones para Calichera. En marzo de 2011, Global Mining, filial de Calichera, vende 5 millones de acciones SQM-A a Linzor Total Return Fund. El mismo día, Linzor revende esos títulos a Oro Blanco. La Fiscalía acusa una "extraordinaria simetría y coordinación". Fueron en total 44 operaciones OD (orden directa) con difusión de tres minutos. En ellas intermedió Banchile.

2 Interviene EY

En diciembre de 2010 y enero de 2011, Calichera vendió y recompró a Oro Blanco 2,5 millones de SQM-A cada vez. Las operaciones permitían generar utilidades contables ficticias por US$ 252 millones, pero no pudieron ser registradas por la oposición de la auditora EY, que estimó que formaban parte de transacciones de un mismo grupo controlador. Motta dio cuenta de esta operación en la reunión de directorio del 19 de enero de 2011, en donde habló de compras "en el mercado abierto" con el objetivo de "mantener la posición controladora de SQM". Para la fiscalía, ello constituyó una confesión involuntaria: las acciones eran las mismas que Calichera había vendido un día antes. La fiscalía concluye que no existió voluntad de enajenar los activos.

3 La primera, en 2009

Calichera compra el 18 y 21 de diciembre de 2009 3,3 millones de acciones SQM-B a Citigroup e Inversiones del Parque en 10 OD en la Bolsa Electrónica. Entre el 23 y el 29 de diciembre, Calichera vendió 3,46 millones de acciones, pero a precios menores. Así, Calichera tuvo una pérdida financiera de US$ 1,3 millones, pero generó ganancias contables por US$ 72 millones. Sobre estas transacciones, la SVS destacó la mecánica, la reiteración de participantes, concordancia en el horario de ingreso de las órdenes, la realización de las OD y el resultado de ellas.

4 SQM-B, marzo de 2010

Con cinco días de diferencia, Calichera compra y vende acciones de SQM-B con una pérdida de US$ 0,5 millón y una utilidad contable ficticia de US$ 12 millones.

5 SQM-B, abril de 2010

Calichera compra y vende títulos de SQM-B entre el 22 y el 28 de abril de ese año. Pierde US$ 0,2 millones. Estas operaciones no fueron informadas al directorio de Calichera.