Tras acreditarse la falsedad del testimonio de dos niñas de la comuna de Ñuñoa  que acusaron haber sido subidas a un automóvil y abusadas sexualmente, la fiscalía metropolitana Oriente hizo un llamado a la comunidad a realizar denuncias responsables.

El vocero de esta repartición del Ministerio Público, Mario Schilling, manifestó que pese a la notoriedad del caso " no nos sorprende esta falsa denuncia dado que, lamentablemente,  la gran mayoría de denuncias de delitos sexuales que recibe esta fiscalía Oriente son inventadas".

Pese a la serie de recursos que se gastaron en el trabajo de las policías y una fiscal especializada en investigar delitos sexuales, Schilling explicó que  "no se va a seguir acción judicial en contra porque esta fiscalía se dedica a perseguir delitos reales y serios,  no casos de menores donde en lo que realidad necesitan es orientación y apoyo".

"Obviamente que hacemos un llamado a que se hagan denuncias responsables ya que tuvimos que destinar a una fiscal especialista en delitos sexuales para investigar un caso imaginario, descuidando su tiempo que podría haberlo destinado a casos reales", puntualizó el vocero de la fiscalía Oriente.

Las dos menores, identificadas como J.M.A.E.  y J.A.A.A., habían sostenido que en la esquina de las calles Coventry y Amapola, comuna de Ñuñoa, los supuestos antisociales las habrían subido a un furgón utilitario a la fuerza, para luego abusar de ellas.

Según las primeras declaraciones, las escolares -pertenecientes al colegio Maya School- habrían permanecido cerca de dos horas y media en el vehículo, para luego ser soltadas en la Avenida Nueva Bilbao, en las cercanías de la Ciudad Deportiva de Iván Zamorano.

Sin embargo,  Carabineros detectó algunas incongruencias tanto en las declaraciones como en el perfil psicológico de ambas menores,  por lo que se realizaron investigaciones ante una posible historia ficticia.

Se procedió a realizar una reconstitución de escena, en donde las niñas nuevamente entraron en contradicciones, hasta que, finalmente una de ellas reconoció que la denuncia realizada era totalmente falsa e indicó que inventó la historia por problemas de índole familiar.