Pronto se cumplirá un año de la promulgación de la Ley de Tabaco que comenzó a regir el primero de marzo de 2013. En medio de este escenario, las cifras de la Seremi de Salud Metropolitana, a las que accedió La Tercera, revelan que las fiscalizaciones por la "antitabaco" en el Gran Santiago, aumentaron de 523 registradas en 2012, a 6.908 realizadas en 2013.
Se trata de la Ley 20.660 que básicamente prohíbe fumar en todo espacio cerrado de acceso público. Esto incluye estadios, pubs, restaurantes, discotecas y casinos de juegos. El corazón de la Ley apunta a proteger a los fumadores pasivos, principalmente los niños y enfermos crónicos.
La normativa otorga un rol fiscalizador a las seremis de salud e inspectores municipales y son los Juzgados de Policía Local quienes tienen la potestad de emitir sanciones.
Lo que establece la Ley y por lo cual causó polémica desde su ingreso al parlamento, siendo nominada como "talibana", es que las personas naturales también pueden ser multadas por los organismos competentes.
El desglose de los registros, muestra que en 2013 el 36, 2% de las fiscalizaciones se realizaron en locales de alimentos, restaurantes, pubs, discoteques, entre otros sitios de iguales características. Un 4,7% se llevaron a cabo en establecimientos educacionales, el 13,6% en establecimientos de salud y un 40,8% se llevó a cabo en otros sitios.
Respecto a las multas, estas se elevan de 1 a 2 UTM ($ 40.005 febrero) a cada persona que trasgreda la norma y se le cursa al dueño o administrador del local. Además, se eleva la multa de media UTM a 2 UTM aplicada al fumador que transgreda la prohibición de fumar en los lugares restringidos para ello.
En cuanto a las infracciones cursadas, estas sumaron 56 en total: 40 corresponden a "instalaciones" y las otras 16 a personas naturales.