Fitch Ratings elevó su perspectiva de la deuda de Irlanda de negativa a estable, destacando los esfuerzos del gobierno para convertirse en la primera nación de la zona euro en salir de un rescate desde que se instaló la crisis de deuda.
Fitch afirmó la calificación BBB+ del país, haciendo referencia a una reducción del déficit fiscal y la opinión de que sus bancos probablemente no necesiten más capital estatal. Fitch, con sede en Londres, que retiró a Irlanda de la vigilancia negativa en enero, despojó al país de su calificación AAA en abril de 2009.
"Es alentador ver más señales positivas de las agencias de calificación respecto de Irlanda", dijo Philip O'Sullivan, economista de NCB Stockbrokers de Dublín, en un correo electrónico. "Luego del reconocimiento público de Moody's de que los riesgos irlandeses se han mitigado, la mejora en las perspectivas irlandesas decidida por Fitch es otro elemento positivo".
Moody's Investors Service ayer eliminó la advertencia de que Irlanda podría seguir el camino de Grecia e infligir pérdidas a los inversionistas, luego de que el gobierno efectuara un regreso parcial a los mercados de crédito y achicara su déficit. Irlanda salió de los mercados internacionales de bonos y pidió un rescate de 67.500 millones de euros (US$86.000 millones) en 2010, cuando su sistema bancario llegó a estar cerca de una debacle.
Propiedades
El organismo de deuda calificó la medida de Fitch de reconocimiento alentador de los esfuerzos del Estado para hacer frente a la crisis desatada por la implosión de una burbuja inmobiliaria en 2008. El Estado inyectó unos 64.000 millones de euros en su sistema financiero y ahora controla a cinco de los mayores bancos nacionales.
El gobierno del primer ministro Enda Kenny podría tener que esperar algún tiempo antes de ver una mejora en su calificación crediticia. La nota de Irlanda sigue "constreñida y afronta riesgos a la baja" debido a los altos niveles de deuda pública y privada, dijo Fitch.
El Ministerio de Economía de Irlanda rebajó su pronóstico de crecimiento para el año que viene y 2014 ante la desaceleración de la expansión de las exportaciones y la caída del gasto de los consumidores. Se pronostica que la economía irlandesa crecerá 1,5 por ciento el año que viene, frente a una estimación de abril de 2,2 por ciento, informó el ministerio.
En una entrevista telefónica, el analista de Fitch, Gergely Kiss, dijo que las perspectivas de una elevación de la nota irlandesa son "muy bajas" en el corto plazo. Irlanda recibió la máxima nota de Fitch en 1998 y la perdió hace tres años.
Moody's califica a Irlanda por debajo del grado de inversión, mientras que Standard Poor's tiene una perspectiva negativa para Irlanda, aunque ha mantenido al país en el grado de inversión.
"Aunque no tiene el mismo impacto crucial que una medida similar de Moody's, la decisión de Fitch es una recompensa por la firmeza de Irlanda "en tomar las decisiones difíciles", señaló Owen Callan, analista de Danske Bank A/S de Dublín, operador primario de la deuda del gobierno irlandés.