La agencia de riesgo Fitch mantuvo este lunes un panorama crediticio "negativo" para Italia, y dijo que un nuevo gobierno encabezado por el líder de centroizquierda Matteo Renzi probablemente enfrente los mismos desafíos que su predecesor Enrico Letta en un escenario político volátil.
La incertidumbre política y una profundización de la recesión italiana llevaron a Fitch a recortar la calificación soberana del país a la actual "BBB+" en marzo.
"La incertidumbre sobre la permanencia de los gobiernos (italianos) y su capacidad para realizar reformas estructurales y consolidación fiscal es una razón del panorama negativo sobre la calificación 'BBB+' de Italia", dijo Fitch.
La cauta evaluación de Fitch se da días después de que la agencia Moody's elevara su panorama italiano a "estable" desde "negativo" por primera vez desde el comienzo de la crisis de la zona euro, repitiendo lo que ya había hecho con el panorama para España en diciembre.