El Fondo Monetario Internacional (FMI) señaló que el Banco Central tiene espacio para seguir bajando la tasa de interés, que el instituto emisor mantiene en 2,5% desde mayo, en medio de un escenario de menores presiones inflacionarias.
"En Chile la política monetaria es debidamente expansiva, pero puede haber margen para relajarla más dadas las presiones a la baja sobre las expectativas de inflación", dijo el organismo en el marco de su informe Perspectivas económicas: Las Américas - Actualización.
Asimismo el documento indica que "en vista de las moderadas perspectivas de crecimiento, se aconseja una consolidación fiscal gradual, pero que daría una señal de compromiso con la prudencia fiscal y aplacaría posibles inquietudes acerca de la incertidumbre fiscal".
Ayer el presidente del Banco Central, Mario Marcel, señaló que tras la sorpresiva caída de 0,2% en la inflación de septiembre el organismo está analizando si ese resultado altera la convergencia a la meta de inflación del 3%. "Es algo que tendremos que analizar desde la perspectiva de cómo y si puede alterar la convergencia hacia el objetivo de 3%. Puede o no puede hacerlo. Pero es un riesgo que identificamos", dijo Marcel en una entrevista con la agencia Reuters en Washington, donde asiste a una reunión del FMI y el Banco Mundial.
CRECIMIENTO
En cuanto al desempeño económico el FMI dijo en su informe que "en Chile, el crecimiento débil continuó en el primer semestre de 2017, a pesar de la resiliencia del gasto de los hogares. La actividad económica se vio frenada por trastornos en la producción de cobre a raíz de prolongadas huelgas de trabajadores y por niveles moderados de confianza e inversión empresarial debidos, en parte, a la incertidumbre en torno a las políticas".
Sin embargo, indicó que se prevé que el crecimiento se afiance en el segundo
semestre de este año y que repunte aún más en 2018, respaldado por el gasto de los hogares, la recuperación de la demanda en los países socios, precios más altos del cobre y condiciones monetarias más acomodaticias.
El martes al dar a conocer su actualización de estimaciones globales el FMI redujo su proyección para el crecimiento de la economía chilena este año a 1,4% desde el 1,6% estimado en julio, debido a la debilidad de la inversión fija privada, la producción minera y el consumo público.
Además, el organismo elevó su previsión para el 2018 a una expansión de 2,5% desde el 2,3% pronosticado previamente.