Fue en julio de 2013 cuando Abdelfatah Al-Sisi, ex comandante en jefe de las Fuerzas Armadas de Egipto, encabezó un golpe de Estado contra el Presidente Mohamed Morsi, lo que significó su destitución. Desde esa fecha, la Península del Sinaí, fronteriza con Israel y la Franja de Gaza, se ha convertido en una zona de conflicto entre las fuerzas egipcias fieles al gobierno dirigido por Al-Sisi y los grupos islamistas locales que rechazan a la élite del Ejército que controla el país. Si anteriormente el Sinaí era una zona que solía atraer turistas de Israel y de otras partes del mundo, hoy es sinónimo de ataques mortíferos.

La Península del Sinaí es habitada mayoritariamente por beduinos, y quienes se alzaron inicialmente contra el gobierno de Al-Sisi eran parte de la juventud beduina. Así, gracias a la llegada de experimentados combatientes yihadistas, surgió Ansar Bait al-Maqdis, grupo que asumió la autoría de varios ataques contra las fuerzas de seguridad egipcias.

En 2014, el grupo juró lealtad al Estado Islámico y pasó a convertirse en Al Wilayat Sina. Desde ese momento, los ataques en la Península del Sinaí se han intensificado, lo que provocó que desde 2014 la región viva en estado de emergencia. La mayoría de sus operaciones se dirigen principalmente contra la policía, el Ejército y otras fuerzas de seguridad. Sin embargo, también llevan a cabo ataques suicidas y ejecuciones de musulmanes sufistas, cuya interpretación del Islam consideran "herética".

En octubre de 2015, el grupo Al Wilayat Sina, cuyo nombre significa Estado del Sinaí, reivindicó un ataque en el que murieron 224 ocupantes de un avión ruso. La nave estalló luego de despegar de Sharm el-Sheij, a orillas del mar Rojo, en el sur de la península. Hasta ayer, éste había sido el ataque más mortífero en la región.

Otros atentados más recientes en la Península del Sinaí ocurrieron el 7 de julio de este año, cuando miembros del EI atacaron un puesto de control de seguridad egipcio en El-Barth, en el norte del Sinaí, y mataron a 23 soldados. En tanto, el 18 de septiembre miembros de las fuerzas de seguridad murieron durante un ataque contra un convoy que pasaba de El-Arish a Qantara. También, el 24 de octubre, dos ataques terminaron con 33 miembros del personal de seguridad egipcio fallecidos. Uno de esos atentados fue cerca de El-Arish, la capital del Sinaí.