Molesto y señalando al juez que no hablará, llegó hasta la sala de audiencias del Tribunal de Garantía de Linares Arturo Méndez Romo, de 50 años, quien el pasado domingo 24 y según los antecedentes entregados en la audiencia pública por la fiscalía, le disparó con una escopeta a Eduardo Vásquez Vásquez, de 76 años, quien perdió la vida en forma inmediata al interior de su casa en el sector La Puntilla de Longaví.
No conforme con lo anterior, al momento de llegar a la residencia una sobrina de la víctima, Méndez la amenazó de muerte disparándole incluso un tiro con un rifle a postón para luego golpearla duramente y atarla de pies y manos en una silla, sitio donde la sometió por largas horas a diversos actos de connotación sexual.
"Esperamos conseguir la pena más alta que sea posible. El ha sido formalizado por varios delitos y ninguno de ellos tiene una penalidad baja", explicó la fiscal Loreto Escobar, quien desde el primer minuto de conocidos los hechos ha encabezado las diligencias y acciones a seguir por parte de las policías.
La fiscal agregó que "considerando además que este sujeto tienen una condena anterior por homicidio calificado, obviamente su tratamiento no es el mismo en materia de pena qué el de una persona que no tiene antecedentes".
El sujeto, quien ya fue condenado como autor del homicidio calificado de Fidel Coronado, hecho ocurrido el 21 de diciembre del 2001 en Colbún, había salido hace algunos meses de la cárcel tras haber cumplido su condena de ocho años.
A petición de la Fiscalía, el Tribunal dispuso la prisión preventiva del imputado tras considerar que es un peligro para la víctima y la sociedad, fijándose un plazo de cuatro meses para la investigación.
La sobrina de Vásquez, en tanto, se recupera de las agresiones sufridas y se encuentra bajo el apoyo social y sicológico de la Unidad de Víctimas y Testigos de la Fiscalía Regional del Maule.