Tras el primer retiro de Michael Schumacher, la pregunta era quién y cuándo aparecería un heredero o, al menos, un piloto capaz de amagar el récord de siete títulos del "Kaiser". La irrupción de Sebastian Vettel, en 2007, y su precocidad para lograr triunfos y coronas dieron una rápida respuesta a esas interrogantes.
A sus 26 años, los números del volante de Red Bull ya lo ubican entre los grandes de la historia de la Fórmula Uno. Este fin de semana, en Singapur, logró convertirse en el corredor activo con más victorias, superando por una al español Fernando Alonso, pasando arriba en una de las pocas estadísticas en que aún no superaba a sus contemporáneos.
A esta altura, el germano es visto con perspectiva histórica y sus marcas, respecto a títulos, victorias y poles positions, salen bien paradas ante leyendas del "Circo".
Además, tiene altas posibilidades de agrandar esos números en el corto plazo, en especial el de coronas, que esta temporada, si no sucede un descalabro mayor, aumentará a cuatro, dejándolo apenas por detrás de "Schumi" y el argentino Juan Manuel Fangio (5), e igualado con el francés Alain Prost.
Niki Lauda lo da por hecho, incluso. "Estoy seguro de afirmar que será campeón en Abu Dhabi (dos fechas antes del cierre)", aseguró el austriaco, tricampeón en 1975, 1977 y 1984. "No está luchando contra nadie, su ventaja ya es suficientemente grande", agregó.
VETTEL VS. SCHUMACHER
Schumacher, Prost, el argentino Juan Manuel Fangio y el brasileño Ayrton Senna aparecen como los próximos rivales en la carrera con la historia que lleva Vettel, quien ya tiene mejores estadísticas que ilustres como Jackie Stewart y Lauda.
Eso sí, la gran comparación del actual monarca es con Schumacher. Es más, en sus primeros años lo apodaban "Baby Schumi". Pero el paralelo no le agrada mucho. "Es ridículo que pueda compararme con él. Tengo tres títulos que no son nada comparados con sus siete. Batir su récord no es algo que pueda pasar en los dos próximos años, así es que no me lo planteo", decía hace unos meses el piloto de Red Bull.
Sin embargo, el heptacampeón del mundo cree que Vettel es el elegido para romper la marca de títulos.
"Los récords están para batirse. Me motivaron cuando competí y al final lo conseguí. Si Sebastian es capaz de superar lo que hice, estaría contento por él. En poco tiempo ha ganado tres títulos, así es que ¿por qué no podría ganar siete?", le dijo hace unas semanas "Schumi" a la cadena de televisión belga Vier.
Pero para los títulos faltan, al menos, cuatro años. Lo más pronto para Vettel es batir la marca de porcentaje de victorias. Si el piloto gana en Corea del Sur y Japón, superará el coeficiente de Schumacher y quedará cerca de otra leyenda, el británico Jim Clark. Si no es así, Vettel y su monoplaza "Hungry Heidi" (le gusta ponerle nombre de mujeres a sus autos) de seguro tendrá más oportunidades de acrecentar sus hitos. Su leyenda está en constante movimiento.