El líder libio, Muammar Gaddafi podría permanecer en Libia si cede el poder, es la concesión que hace Francia en un nuevo intento por encontrar una solución política a una crisis que ya lleva 5 meses, en medio de frustrados intentos para que el coronel dimita.

"Uno de los escenarios efectivamente concebidos es que permanezca (...) con una condición que repito: que abandone claramente la vida política libia", declaró al canal francés LCI , el canciller galo, Alain Juppe.

En cuanto a las posibles negociaciones con Gaddafi, Juppe afirmó que actualmente no hay conversaciones en París con ninguno de sus representantes y que el enviado de la ONU, Abdul Elah al Khatib ahora está encargado de coordinar esos contactos. "El tema ahora no es si Gaddafi se va, sino cómo y cuándo", enfatizó.

Pero el ministro de Relaciones Exteriores de Gaddafi, Abdelati Obeidi, rechazó de inmediato la propuesta, diciendo que la partida del líder libio, luego de 41 años en el poder no es un tema en discusión.

"La salida de Gaddafi ni siquiera se plantea. Este punto tampoco figura en las propuestas de arreglo que han sido presentadas por la Unión Africana (UA)", dijo Obeidi, citado por las agencias rusas, tras reunirse con su homólogo, Serguei Lavrov.

La visita del emisario del líder libio a la capital rusa se produce después de que EEUU y otros  países reconocieran al Consejo Nacional de Transición (CNT) como el "representante legítimo del pueblo libio". Precisamente, Lavrov aseguró ayer que Rusia reconoce a los rebeldes como interlocutores, pero no como único poder legítimo en Libia, y criticó a Occidente por intentar aislar a las fuerzas leales a Trípoli.