Francia y el Reino Unido tienen intención de levantar el embargo de armas a los rebeldes sirios, aunque no consigan convencer al resto de sus socios de la Unión Europea (UE), afirmó hoy el ministro francés de Exteriores, Laurent Fabius.

Preguntado exactamente por si los dos países levantarían ese embargo pese a una decisión negativa en el seno de la UE, Fabius respondió "sí, exactamente", en una entrevista a la emisora de radio "France Info".

Reiteró que con los británicos Francia mantiene "una posición idéntica".

"La posición que tomamos con los británicos es que los europeos levanten el embargo para que los resistentes (sirios) puedan defenderse", había explicado previamente el ministro francés.

Precisó que habían pedido igualmente que se avance la reunión de la UE para determinarse sobre esa cuestión, y aunque no estableció un plazo, consideró que "hay que ir muy rápido".

"No se puede aceptar el desequilibrio actual" en que el régimen del presidente, Bashar al Asad, recibe armamento de Rusia e Irán y los rebeldes no, argumentó.

A ese respecto, hizo hincapié en que "Bashar no quiere moverse porque considera que tiene la superioridad permanente con las armas".

Fabius consideró que "el balance es horrible" en el conflicto sirio, con "más de 70.000 muertos" y cientos de miles de refugiados, en particular en Jordania, donde la situación es "dramática".

En un artículo publicado hoy por "Libération", el ministro francés consideró que los opositores del Consejo Nacional Sirio (CNS) "no ha dudado en tender la mano a ciertos adversarios para tratar de acabar con esta carnicería" pero "Asad ha respondido con más bombardeos y poniendo condiciones inaceptables". 

"El proceso político corre el riesgo de seguir bloqueado si la situación sobre el terreno no evoluciona. Y por ahora el combate del pueblo sirio por la libertad es terriblemente desigual", ya que "la oposición no dispone de medios suficientes para proteger a la población", argumentó.

Fabuis se mostró convencido de que "Bashar al Asad sólo tomará en serio la oferta de negociación de la CNS si no tiene otra solución" y eso significa que "para que una solución política tome realmente cuerpo, la Coalición no puede seguir" con un armamento muy inferior.

"Tenemos que ir más allá y permitir que el pueblo sirio se defienda contra este régimen sanguinario" porque "si no, la matanza continuará sin otra probable salida que el refuerzo de los grupos más extremistas y el hundimiento de Siria con consecuencias desastrosas para el país y para toda la región", concluyó.

El jefe de la diplomacia francesa reconoció que el embargo europeo de armas partía de "una idea generosa: no añadir más muertos a los muertos". 

"Pero ahora -añadió- ese embargo se vuelve contra los que tenía ambición de proteger" porque no evita que Rusia e Irán armen el régimen de Asad mientras "impide apoyar a los que luchan legítimamente contra él".