El ejército francés comenzó una ofensiva militar contra las tropas del presidente saliente de Costa de Marfil, Laurent Gbagbo, quien se niega a dejar el poder y cederlo al mandatario electo reconocido internacionalmente, Alassane Ouattara.
La incursión francesa se realizó en conjunto con las fuerzas de la ONU que se mantienen en ese país(ONUCI). Fueron atacadas bases militares mediante misiles enviados desde helicópteros. Posteriormente, hicieron lo mismo contra el palacio presidencial y la residencia de Gbagbo.
Según un comunicado emitido por el Presidente Nicolas Sarkozy, se está actuando "conforme a la resolución 1975 del Consejo de Seguridad de la ONU", por la que la ONUCI acaba de empezar a "neutralizar las armas pesadas utilizadas contra la población civil y el personal de Naciones Unidas en Abiyán".
Según consigna el diario español El País, la decisión de Sarkozy coincide con el secuestro de varios extranjeros por parte de las fuerzas de Gbagbo que se encontraban en el hotel Novotel de Abiyán. Al menos, dos son franceses, según confirmó el ministerio de Asuntos Exteriores francés. "Los blindados de la ONU estaban allí y lo vieron todo, pero no podían intervenir", explicó un periodista de la cadena de televisión LCI.
Paralelamente las tropas del Presidente Ouattara (se calcula entre 4.000 y 5.000 hombres) avanzaron sobre la capital junto a decenas de carros de combate de las Fuerzas Republicanas de Costa de Marfil (FRCI) y de los ex rebeldes de las Fuerzas Nuevas.
El conflicto se inició tras las elecciones de noviembre de 2010, cuando la comisión electoral selló la victoria de Ouattara con un 54,1% de los votos y de inmediato fue reconocido por la comunidad internacional. Sin embargo, el Consejo Constitucional, partidario de Laurent Gbagbo indicó en ese minuto que éste era reelegido por un 51,45%. Desde ese entonces Gbagbo se niega a abandonar el cargo.