A la una de la tarde, Francisco López y su maltrecha rodilla derecha entrarán a pabellón en la Clínica Las Condes. Hace meses que el dolor está ahí, incorruptible, apareciendo en las instancias en que su ausencia sería una bendición. Chaleco no lo soporta más y, después de mucho meditarlo, se ha decidido, aunque eso le signifique no correr el próximo Dakar. Su futuro en las motos depende de cómo salga de los seis meses de rehabilitación.
¿Desde cuándo arrastra la lesión?
Está hace mucho rato. Los ligamentos están cortados hace tres años, más o menos. Me empezó a afectar los discos, los cartílagos. Es una lesión molesta, que duele. Tratamos de manejarla, pero lamentablemente el dolor, las molestias y la mentalidad me hicieron bajarme para este Dakar. Cuando estaba en Aprilia (2010-2012) me rompí algo que no se recuperó nunca y el desgaste del tiempo, con los entrenamientos y las carreras, generó que no me sienta cómodo arriba de la moto.
¿Cuánto le costó tomar la decisión?
Harto. Empezamos a sumar, a restar, a pensarlo con la almohada, hablarlo con la familia, con la polola, con los doctores, aunque al final el que decide es uno.
¿Qué cambia en las últimas tres semanas, desde que anuncia sus dudas respecto del Dakar?
No mucho. Nunca he dicho que me voy a bajar de la moto todavía. Hay una lesión que está hace tiempo y había que revisarla, decidirse a pasar por el quirófano. Traté de hacer bicicleta, de hacer musculatura, pero la molestia en la rodilla estaba siempre. Por eso tomamos la determinación.
Dice que no se baja de la moto, pero da toda la sensación de que mucho arriba de ella no le queda.
Nunca he dicho que quiero bajarme de la moto. Tampoco estoy diciendo que sigo corriendo. No, lo que pasa es que existe la posibilidad de que me opere, y me voy a operar, y después de eso viene la recuperación, la motivación. Luego de eso, tomaré una decisión. Pero no estoy claro todavía. Estoy recién quedándome fuera de este Dakar, lo que me tiene un poco bajoneado. Después, en el transcurso del año, veré cómo es mi recuperación y la motivación que tenga.
¿Qué le dicen los doctores?
Todo depende de mí. No es un tema que, médicamente, me digan que estoy fuera. Obviamente, la lesión es compleja, está bastante roto el sector de la rodilla, hay dolores, cosas cortadas. No es una operación de meniscos y estamos.
Entonces, depende de usted exclusivamente. ¿Qué tiene que pasar para que opte por seguir?
Más que los dolores, son las ganas, la motivación. Hoy, antes de operarme, no estoy preparado para seguir corriendo un Dakar o una prueba de este estilo.
¿Y si la operación es un éxito?
Ahí lo analizaría.
Por eso le digo. Parece tener la decisión de dejar las motos a medio tomar.
Es evidente. Mañana (hoy) es la operación, después viene la recuperación, en la que dejo de hacer deporte. Es un tema que debo vivir.
¿El proyecto de correr el Rally Mobil en 2015, cuán avanzado está?
¿Qué tan avanzado? Al día de hoy no tengo auto, equipo ni nada claro, pero están las ganas. Mis auspiciadores quieren que vaya. Aún es muy pronto, pero que ellos quieran es fundamental.
¿Depende de si continúa en las motos o es algo paralelo?
Es paralelo. Al Rally Mobil voy sí o sí. En qué categoría, ya veremos.
Esta lesión de tan larga data, ¿lo va preparando para la decisión de dejar las motos?
La moto nunca la voy a dejar. Profesionalmente, sí, en algún minuto. Todo este tema de los doctores, de las molestias, lo he venido pensando todo el año. Fuimos a Marruecos, probamos y siguió. No es algo que un día se cortaron los ligamentos y dije "oh, quedé afuera". Lo empezamos a conversar con todo el equipo y nos íbamos dando cuenta de que no estábamos consiguiendo lo que nos proponíamos. Y por eso tomamos la determinación. No fue un golpe de una. Viene de hace unos tres meses.
¿Pensó en correr lesionado?
Lo analicé, pero rápidamente vi que tenía le mente en otro lado. No estaba al 100 por ciento e ir a correr un Dakar a un 60, 50 por ciento, no era opción. Cuando voy a una carrera, siempre intento entregar lo mejor y ojalá llegar al podio.
El 2015 será un año decisivo. Evaluará si sigue en las motos y probará el Rally Mobil.
Es un año en que quiero disfrutar de las cosas. Quiero recuperarme bien y hacer un buen Rally Mobil. Espero sentirme motivado para seguir en las motos. Pero también es cierto que (el retiro) es una opción natural de un deportista de elite.
¿El Rally Mobil es un escenario para preparar el cambio a los autos en el cross country?
Mi fuerte es el cross country. Sé navegar bien, conozco la geografía. Es parte de un proceso para algún día llegar a correr en autos. Para allá estamos apostando.