El fin de semana pasado, en el partido frente a Colo Colo, Johnny Herrera y José Rojas fueron los artífices del cambio de actitud de la "U" de cara al segundo tiempo, con una importante arenga en el camarín. En el partido de ayer, el escenario se repitió, pero esta vez, en voz del entrenador Darío Franco, quien instó a sus dirigidos a no desaprovechar la oportunidad de ganar una final y a sacar provecho de la ventaja numérica que tenían por la expulsión de Gonzalo Sepúlveda.

"Conversamos todos, pero en especial el técnico nos dijo que, en este partido, estaba el esfuerzo de un año entero. Nosotros así lo sentimos. No podíamos defraudarnos a nosotros mismos", aseguró Charles Aránguiz, uno de los mejores jugadores de la final.

La orden del estratega era entrar por bajo, jugar con tranquilidad y aprovechar los espacios en la cancha que cedería la UC al irse atrás. Además, según cuenta un integrante del plantel, "Franco recordó que esto era una fiesta, que no podíamos dejarla pasar por toda la gente que viajó hasta acá. Nos dijo que estábamos hechos para grandes cosas, como lo que hicimos en el clásico y que este partido no podía terminar distinto".

"Sufrimos demasiado para ganar el partido, tuvimos que haberlo cerrado mucho antes. Lo que hablamos en el entretiempo fue importantísimo, en lo futbolístico y en lo anímico, porque salimos muy prendidos a jugar el segundo tiempo", aseguró César Cortés.

EL FESTEJO DEL PLANTEL

El pitazo final dio paso a desatados festejos entre los jugadores estudiantiles. Primero, antes de volver al camarín, los más eufóricos fueron Paulo Garcés y César Cortés, que fueron hasta el sector de la hinchada para entonar cánticos en contra de su ex equipo.

Ya en el vestuario, los jugadores saltaron, cantaron y gritaron por largos minutos. Mojaron a los dirigentes y al técnico Franco que, acompañado de su hijo, abrazó uno por uno a cada integrante del plantel. Luego de esto,  cantaron canciones alusivas al santoral católico que, ayer, estaba reservado para San Segundo.

"Hoy día nos dijimos que no podíamos perder. Porque el santoral recuerda a San Segundo. Y sabíamos que eso le iba a tocar vivir a la UC", confidenció uno de los futbolistas.

Ya con más calma, la mayoría de las felicitaciones recayeron sobre Juan Ignacio Duma, autor de dos goles el fin de semana ante Colo Colo y del tanto del triunfo en la final de anoche.

"Ha sido una semana soñada. La UC, con uno menos, se metió atrás y sólo quería llegar a los penales. Al final, el resultado fue más que justo", cerró el delantero.